Rihanna vuelve a los escenarios: su actuación en la Super Bowl la encumbra a lo más alto

Un emocionante partido en el que los Philadelphia Eagles y los Kansas City Chiefs se han batido y han proporcionado una fiesta única, en pasión y buen juego, en el State Farm Stadium en la ciudad de Glendale, Arizona. Y es que se trataba de alzarse con el preciado título de Campeón anual de fútbol americano, que finalmente lo han conseguido los Chiefs.

Para recordar la anterior actuación de la cantante hay que remontarse a la gala de los Grammy de 2018. Por ello, la artista de Barbados ha sabido escoger este excepcional evento para su gran vuelta a los escenarios ante millones de telespectadores.

El tema que ha elegido para abrir el 'show' ha sido 'Bitch better have my money', uno de los más famosos. La artista ha optado por un look totalmente rojo y estaba acompañada de varios bailarines, todos ellos de blanco.

Durante la actuación, Rihanna ha querido hacer un repaso de sus 17 años de trayectoria profesional en el mundo de la música. Ha interpretado canciones como 'We found love', 'Rude Boy', 'Work', entre otras.

Sin embargo, cuando ha sonado 'Umbrella' ha sido cuando la barbadense ha llegado a lo más alto. Literalmente. El escenario, que era una plataforma flotante, ha comenzado a elevarse hacia el 'cielo', dejando abajo el verde del estadio. La artista ha cerrado el espectáculo de la Super Bowl con su famoso 'Diamonds'.

A diferencia de 2020 donde Jennifer Lopez actuó junto a Shakira, Rihanna no ha contado con un invitado especial. Algunos de los nombres más sonados durante estas últimas semanas han sido, de nuevo, el de la colombiana y el de Drake. No obstante, la cantante ha optado por interpretar todos sus temas en solitario.

Rihanna ha hecho varias referencias durante su actuación. Una de ellas ha sido a su marca de belleza, 'Fenty Beauty'. Mientras cantaba, ha hecho como si se retocara el maquillaje.

Aunque lo que más ha llamado la atención de todo ha sido el posible anuncio de lo que sería su segundo embarazo. La artista, durante la actuación, se ha tocado el vientre.