Liam Gallagher desafía al sol y le vence, y Red Hot Chili Peppers suenan blandos en el día final del Mad Cool

Antes vimos a Cupido, la superbanda liderada por Pimp Flaco junto a los Solo Astra, y que a las siete de la tarde juntaron a un buen público con su indie electrónico tipo Alizzz y canciones de amor, desamor y demás temas obsesivos de la juventud. Carisma, ligereza y ascendencia entre la muchachada bailonga que pasó un muy buen y sensual rato entre storie y storie.

Manos cruzadas en la espalda, inclinación hacia delante sacando culete y '(Whats the Story) Morning Glory?'. Este es Liam Gallagher, el loquito, arrogante y vacilón excantante de Oasis. Que también es puro rock and roll. Mil grados centígrados y el tío con su sudadera con capucha. A la contra de la inteligencia más básica, la rebeldía es uno de las bases del rock y el sentirse guapo, pues también. Llega 'Rock N' Roll Star', que viene que ni al pelo de esta pequeña disertación.

Prohibido sonreír, porque es muy malote, pero tiene al público en el bolsillo himno tras himno de Oasis, tocando incluso alguna para los muy cafeteros ('Roll It Over'), la realidad es que es uno de los grandes conciertos de todo el Mad Cool. Canciones, actitud, coro de tres mujeres y una buena banda enchaquetado alguno (¿ordenes del jefe?) y desafiando así al sol y venciendo. Hasta hizo una mueca de asco al astro celeste. Y no suda, es una raza superior, siempre con las maracas en la mano el Maracas de Oasis. ¡Se puso hasta la capucha! E hizo una pequeña vacilada saludando solo a los fans del Manchester City entre el público. Llegó 'Wonderwall', móviles en lo alto, y hasta el sol se escondió en ese momento. Había ganado definitivamente. Y cerró con 'Champagne Supernova'.

Le tocó luego a M.I.A., con su hiperpop árabe dando el toque de modernidad en sustitución de la también muy moderna Janelle Monáe, la británica hizo un concierto con proyecciones muy coloridas y vanguardistas, como ella en su propuesta artística, básicamente. Las bases sonaron un poco flojas y agitó al personal, al final, con una última remesa de sus canciones más conocidas, sobre todo con 'Paper Planes', disfrazada la cantante con billetes pegados y lanzándose varias veces al público... acabó sin 'money' en su traje. Un show extraño no muy engrasado pero con encanto.

Y, ya por fin, los colosos del cartel del Mad Cool 2023. Los esperados Red Hot, que empezaron con una improvisación larga y ruidosa, antisitema, genial incluso, para luego disparar su clásico 'Around the World', con las angelicales voces de Frusciante sonando preciosas y nítidas sobre las cantadas de Anthony Kiedis con un buen bigotón. Pero después aconteció el tedio, desvanecidos por un sonido blandito por mucho que Flea dé saltos absurdos y anime el cotarro como casi nadie. Otro detalle de su 'regulero' show, los parones entre canciones, una 'performance' poco dinámica, y una elección de temas primando la interpretación experimental entre larguísimos solos de Frusciante que chanaban pero ese no era el problema, el problema es que dónde están los hits, que diría Cristóbal Soria, porque el público entre el sonido flojo y el cansancio ni se movía.

Menos mal que llegó 'Californication', móviles al aire y alborozo momentáneo, sonando esta vez bien, y con deconstrucción en el solo de Frusciante, el inventor de belleza en la banda estadounidense, con esos punteíllos agudos marca de la casa chilipepperiana junto al funk y al rapeo estridente de Kiedis, acabando normalmente en estribillo en una fórmula de contrastes que tan buenos réditos les ha dado. Pero hoy sonaron blandos, y me quedé, de paso, sin ver a un grupo de metal mongolo llamado The Hu, en la carpa contigua, a los que apenas caté pero eran como unos Rammstein de Ulán Bator.

A la vez llegamos corriendo al cierre de Ava Max, dominando las tablas con euforia junto a los bailarines, con su dance pop montó la fiesta que coronó con 'The Motto' y el público, amplio, dándolo todo en la pista. Igualito que Red Hot… que más bien fueron Red Cold Chili Peppers, fríos, aunque terminaron con una última andanada de hits que levantó la causa. Esto es 'By the Way' y 'Give it away', que no es poco. Pero algo faltó.