Catorce años de odisea: así ha sido la lucha por los derechos de autor de Paco de Lucía

En concreto se trata de treinta y ocho joyas de su repertorio incluyendo la más famosa de todas, 'Entre dos aguas', que llevan más de medio siglo generando ingresos para el compositor y arreglista José Torregrosa Alcaraz -y a su familia desde 2005, año en que falleció- de forma indebida, tal como ha dictado la Justicia.

El fraude se destapó hace catorce años, gracias a la decisión de su hija Lucía de cambiar de profesión. Ella era psicóloga, pero cuando surgieron problemas con los derechos de autor de las canciones que Paco grabó con Camarón de la Isla, decidió interesarse por el tema y se lanzó a estudiar propiedad intelectual para poder defender los intereses de su padre. Empezó a gestionar toda la su obra, analizando en detalle cómo estaba registrada, qué obras componían su catálogo autoral y en qué porcentaje, todo tipo de asuntos editoriales, y se dio cuenta de que muchas de sus canciones eran coautorías, cosa que le llamó poderosamente la atención.

Un buen día le comentó sus averiguaciones a su padre, y en concreto le presentó los documentos referentes a treinta y ocho temas que, en los registros de la SGAE, no aparecían como suyas y sólo suyas. «Eso no es así, no puede ser», contestó el maestro. «Cuando le demostré que sí, que era así, se quedó blanco como la pared», cuenta Lucía a ABC tras la feliz noticia de la sentencia favorable.

Decepcionado, triste y sobre todo muy cabreado, Paco le pidió a su hija que lo solucionase cuanto antes porque sabía perfectamente que tenía razón: lo único que hizo Torregrosa fue traducir sus composiciones al lenguaje del solfeo para que pudieran ser registradas, nada más. Llamaron a Teddy Bautista, por entonces presidente de la SGAE, y se confirmaron sus peores temores: él no podía hacer nada. «Ahí fue cuando mi padre entró en cólera. Sufrió mucho dolor al ver que su obra no aparecía como suya, y me encomendó hacer todo lo posible para que sus nietos no se quedaran sin lo que les correspondía por derecho. Eso era lo único que le importaba», rememora Lucía.

'Entre dos aguas' es sin duda la obra más reconocida a nivel internacional y la que más ingresos ha generado durante todo este tiempo, pero a Paco le dolía que no apareciese como suya igual que todas las demás. Tenía treinta y ocho motivos para pelear. Y aunque no haya podido ver su victoria porque la resolución del problema ha llegado nueve años después de su muerte, la estará celebrando allá donde esté.

«En la familia estamos todos saltando de alegría», dice Lucía, «porque además, eesta sentencia crea ley. Es muy específica, está llena de matices, y está perfectamente argumentada. Ha tardado un año en salir pero la argumentación es asombrosa. Es una gran sentencia». Los herederos de Torregrosa ahora tendrán que reintegrar todas cantidades recibidas como explotación de las obras desde que fueron registradas más los intereses correspondientes. Además, tendrán que indemnizar con 10.000 euros por daño moral a la familia del guitarrista.

Los Torregrosa pudieron haber evitado este desenlace tan desfavorable para ellos, pero no quisieron. Los herederos de Paco intentaron llevar a cabo un acto de conciliación en la SGAE, y al ser rechazado también trataron de negociar una salida extrajudicial para evitar «la pérdida de tiempo, de dinero y de moral» que ha sufrido la familia. Pero nunca hubo el menor atisbo de que se pudiera cumplir «la última voluntad» del genio de Algeciras.

Ahora, los Torregrosa tendrá que hacer frente a una sentencia muy dura para sus intereses, y aunque cabe la posibilidad del recurso, la hija de Paco es optimista. «Entiendo que recurrirán, pero la sentencia es tan contundente que estoy segura de que como mucho, sólo se matizará algún detalle menor. La autoría, que es lo que nos preocupa, va a seguir siendo de Paco».