El Met abre temporada en Nueva York con el Wagner del futuro

El respetable del Met no perdona una, pero cuando le dan lo que ansía tampoco regatea su entusiasmo. Hace tiempo que están agotadas las entradas para «El Oro del Rhin» y otro tanto se espera que ocurra con «La Valquiria», que también se estrenará esta temporada. La tercera y la cuarta parte de la tetralogía tendrán que esperar a la temporada 2011-2012.

Nadie sabe exactamente cuánto cuesta el montaje de Lepage, pero «The New York Times» ha llegado a calcular que no menos de 125.000 dólares, y eso en un momento de vacas flacas. Pero la gloria no tiene precio, pensó el mánager del Met, Peter Gelb, cuando ofreció el Anillo a la i-nagotable fantasía de Lepage.

El quebequés nunca ha decepcionado y tampoco se espera que lo haga ahora. Su visión ha exigido reforzar con soportes de acero el escenario del Met para acoger una estructura de 45 toneladas de peso que el director llama cariñosamente «La Máquina» y, cuando no se siente tan cariñoso, «El Monstruo». Es una mastodóntica sucesión de planchas flexibles, que pueden adoptar casi cualquier forma para sugerir toda clase de situaciones y espacios y, sobre los que, sirviéndose de las últimas tecnologías, Lepage «tatuará» luces, colores, vídeos, etc.

Veremos a las doncellas del Rhin cantando suspendidas de un cable a varios metros de altura, pero también veremos a acróbatas y hasta a dobles de los cantantes, vestidos y caracterizados como ellos, para llevar el peso más físico y espectacular de la función, mientras los propietarios de las voces reinan tranquilamente en la parte anterior del escenario.

La expectación es máxima porque a la grandiosidad del montaje se suma la del reparto. Bryn Terfel servirá un muy esperado Wotan, mientras Stephanie Blythe pisa por vez primera el Met en el rol de Fricka. Wendy Bryn Harmer será Freia, Patricia Bardon hará de Erda, y Adam Siegel debutará a su vez como Froh en el Met. También será la primera vez que en este teatro se vea cantar juntos a los hermanos Richard y Dwayne Croft, respectivamente Loge y Donner. Musicalmente, la mayor preocupación es que no cause baja el maestro Levine, recientemente operado de la espalda.

La envergadura del estreno desborda con mucho los límites del teatro. Hoy la obra será retransmitida en directo por siete pantallas gigantes en Times Square. El Met distribuirá gratuitamente 5.000 asientos al aire libre. La función del próximo 9 de octubre se grabará en alta definición y se proyectará en 1.400 teatros y cines de 45 países, a los que se acaba de sumar España, que exhibirá el montaje en los cines Yelmo.