La música en vivo crece por tercer año y se sitúa al nivel previo a la subida del IVA

Las cifras, que se mantienen aún así por debajo de los 260 millones cosechados en 2010, mejoran ostensiblemente el batacazo que supuso para el sector la mayor presión fiscal, cuando entre 2012 y 2013 su facturación cayó hasta los 181 millones y los 158 millones, respectivamente.

«Podemos decir felizmente que seguimos creciendo a pesar de la lacra del IVA, aunque aún no estamos como quisiéramos», ha señalado Albert Salmerón, el nuevo presidente de la Asociación de Promotores Musicales (APM), que hoy ha facilitado estos datos en una rueda de prensa en la que ha mostrado su confianza en que «este será el año» de la prometida rebaja de ese impuesto.

Junto al nuevo vicepresidente, Tito Ramoneda, él ha sido el encargado de presentar el «VIII Anuario de la Música en Vivo» , el cual achaca las buenas cifras, que se extendieron también a pequeños y medianos aforos, sobre todo a la consolidación de festivales (el pasado año se celebraron en España 851) y a las grandes giras internacionales.

Entre estas, destaca la de Bruce Springsteen , que congregó a 160.000 espectadores a su paso por el país, seguido de Coldplay (120.000) y Red Hot Chili Peppers (66.000). Por detrás, AC/DC (62.000), Silvio Rodríguez (50.000), The Cure (49.000), Beyoncé (46.000), Paul McCartney (45.000), Scorpions (39.000) y Muse (33.000).

Entre los españoles, Manuel Carrasco fue, como en las ventas de discos, la gran locomotora del sector de la música en vivo, con 282.000 espectadores en 48 conciertos , seguido de Malú , que reunió a 280.000 personas en 47 shows y fue la primera artista en agotar cuatro veces en un mismo año el aforo completo del antiguo Palacio de Deportes de Madrid.

Estopa (190.000 espectadores en 36 conciertos), Loquillo (165.300 en 43 citas), Alejandro Sanz (155.400 en solo 17 conciertos) y Raphael (120.000 en 32 conciertos) completan la lista de los artistas nacionales con más tirón en vivo a lo largo del pasado año.

«Los grandes festivales también han tenido un papel muy importante y un buen número de ellos funcionaron muy bien, consolidándose como eventos ineludibles, para los que se compran entradan sin siquiera conocer el cartel», ha destacado Salmerón.

El Arenal Sound de Burriana (Castellón) volvió a ser la cita más multitudinaria, con 300.000 asistentes a sus 6 días de música, seguido de Rototom Sunsplash de Benicàssim (Castellón), con 250.000 personas en 8 jornadas, y del Primavera Sound de Barcelona, con 207.500 personas en 5 días.

El «top 10» lo completaron el Viña Rock de la localidad albaceteña de Villarobledo (200.000 en 3 días), el Festival Internacional de Benicàssim (170.000 en 4 días), AlRumbo de Cádiz (150.000 en 4 jornadas), Sónar de Barcelona (115.500 en 3 días), el nuevo Mad Cool de Madrid (102.500), Bilbao BBK Live (102.000 en 3 días) y Resurrection Fest de Viviero (80.500 en 3 días).

Como suele ser habitual, el VIII Anuario refleja además los que serán «los retos centrales que van a marcar el trabajo de la nueva junta» de APM, con la vista puesta en el citado IVA y en un fenómeno que se ha hecho «mucho más notorio» en los dos últimos meses, la reventa de entradas.

«Las webs de reventa están haciendo mucho daño, no solo al sector, sino que son sobre todo un fraude al espectador» , ha denunciado Ramoneda, que ha pedido que se prohíba la especulación y, al mismo tiempo, que se habiliten «caminos» para que los particulares puedan traspasar tickets que no puedan utilizar.

Además, se ha pedido «una auténtica Ley de Mecenazgo que apoye a la cultura» y una Ley de la Música «negociada entre los operadores privados y la administración pública» que regule, entre otros aspectos, «cómo se invierte el dinero público para no generar competencias desleales y que se acabe con el intrusismo».

Ante la celebración mañana del Día Internacional de la Mujer Trabajadora, la nueva junta ha tenido también unas palabras respecto a la presencia femenina en los carteles, tras un reciente informe de la distribuidora Ticketea que denuncia que un 77 por ciento de los conciertos analizados no tuvieron a ninguna mujer como artista o solista principal o como miembro del grupo protagonista.

«Necesitamos más presencia de la mujer, incluso entre los asociados de APM; nosotros estamos con los valores emergentes, pero necesitamos detrás a toda la cadena apoyando, empezando por las compañías discográficas», se han excusado en lo que sigue siendo un punto flaco del negocio.