Maná y Lenny Kravitz no decepcionaron al público de Rock in Río Madrid

El Pescao fue el primero que estrenó el Escenario Mundo a las 17:00 horas. La banda tocó en un curioso y llamativo submarino amarillo. Aunque no había mucha gente, los más jóvenes no se lo quisieron perder; eran fieles seguidores que cantaban sus canciones. Un repertorio de lo más animado y movido, desde temas de su disco en solitario «Nada lógico» hasta alguno de su anterior grupo, El Canto del Loco . El artista madrileño quiso dedicar «Me da lo mismo» a su amigo «Cacahuete», con el que creó la banda y falleció hace algo más de un año: «Para ti, donde quieras que estés. Sé que te hubiera estado estar aquí ». El Pescao terminó su concierto con su famosa canción, «Buscando el Sol».

El grupo murciano Maldita Nerea eligió como segundo tema del concierto «Cosas que suenan a», una de sus canciones más conocidas. De esta manera, atrajeron a más público del que le estaba esperado .

«La vida es más fácil para nosotros por la gente que nos sigue», dedicó el vocalista de Maldita Nerea antes de comenzar «En el mundo genial de las cosas que me dices». El grupo finalizó su concierto con la canción que les dio a conocer, « El secreto de las tortugas » dejando un buen sabor de boca al joven público que pidieron, aunque su deseo no pudo ser concedido, «¡otra!».

Con el concierto de La Oreja de Van Gogh se sustituyó al público más joven, que llenaba las primeras filas, por uno más entradito en años. Leire empezó con «Día Cero», de su último álbum «Cometas en el cielo» y que, además, es el tema de la Vuelta Ciclista a España de este año. Después, repasó temas antiguos de la banda . La vocalista, que iba con un sexy vestido negro y con un guante de rejilla en la mano derecha, quiso mezclar, al principio y final de sus canciones, diferentes estilos musicales . Desde efectos psicodélicos, un tanto estridentes, realizados con un theremín al final de la canción «París»; hasta el piano en «Dulce locura», o la música electrónica en «La niña que llora en tus fiestas». Junto con «Puedes contar conmigo» y «La playa» fueron los momentos más álgidos. La Oreja quiso terminar con la canción que da razón al título de su último álbum « Cometas en el cielo».

El artista Macaco pidió varias veces, animando al público, que temblase el suelo. Sin duda, fue el concierto más animado de la jornada con constantes coros y continuos bailes. Sus temas hicieron que el pie derecho se despegase del suelo seguido del izquierdo. El público interactuó con el «mono» durante todo el concierto. No pararon de corear en temas como «La llama» en el que quiso hacer un «Un rollo pregunta, respuesta», o «Moving» que animó a la audiencia, acompañándole con palmas y coros: «¡Moving, all the people moving, one move, just one dream!» . «¡Una vez más!», decía Macaco, «¡Que tiemble el suelo!».

Macaco aprovechó el concierto para poner un punto de optimismo: «Estamos en un tiempo que se habla mucho de sombras , pero también hay sol, no nos lo van a quitar», dijo en su canción «El sol».

Quiso dedicar «Con la mano levantá» al público. «Un tema que creció y evolucionó con el boca a boca y oído, gracias a vosotros». Todos cantaron como dice la canción, con «la mano levantá».

«Love is the only way» fue un tema «de baile de dos que va a compás». Incluso el artista bajó al foso, para saludar y dar la mano a las primeras filas.

El artista catalán, Dani Carbonell finalizó su concierto con «Monkey Man». Recordó que con quince años, cuando, tocaba por las calles de Barcelona le bautizaron con el nombre Macaco. Esta canción, con toques de ska, revolucionó al público que bailó «pogo» –que consiste en saltar y chocarse en grupo–; otros prefirieron hacer el trenecito. «El mono» se despidió de sus fans agradecido: «Muchas gracias a esos macacos de Madrid, mucho ruido, yeah».

El grupo mexicano Maná ofreció una rápida pero intensa rueda de prensa antes de comenzar el concierto de Lenny Kravitz. En ella pronosticaron la victoria de España en la final de la Eurocopa.

La tarde comenzó con sol y con un airecillo que paliaba el calor. A final del concierto de Macaco, las chaquetas, rebecas y sudaderas se sacaron de los bolsos para abrigar el aire frío que se levantó en la noche de Arganda del Rey.

Mientras que Maná hizo su «porra» del partido, Lenny Kravitz salió al escenario con sus eternas gafas de sol, con un pantalón de camuflaje y con una guitarra eléctrica que parecía una onza de chocolate. Los primeros temas del concierto fueron conocidas canciones como «Always on the run» y «American woman».

El artista estadounidense alargó, durante unos cuantos minutos, el final de la canción «Mr. Cab Driver» a golpe de jazz. Kravitz combinó varios estilos musicales en diferentes temas. Al principio del concierto empezó muy rockero, se desvió hacia el jazz y pasó hasta por el funky.

En la última canción del concierto, «Let love rule», Kravitz saltó del escenario para dar la mano a sus fans y cantar con las primeras filas del público.

El grupo mexicano Maná comenzó el concierto con 20 minutos de retraso. A pesar de ello, lo iniciaron con uno de sus grandes temas, «Oye mi amor» .

Fher, el vocalista de la banda, tras brindar por la selección española, dedicó uno de sus éxitos «a todas esas mujeres que son mariposas traicioneras».

Maná sacó a una chica del público al escenario . Ésta le acompañó con su voz en un mix de dos de sus éxitos: «Se me olvidó otra vez» y «Mi religión».

Tras «Rayando el sol», el grupo mexicano comenzó sus bises. El primero, la emotiva canción «En el muelle de San Blas». Después, con ritmos de salsa y guitarra su famoso tema «Corazón espinado».

El primer día de Rock in Rio finalizó con fuegos artificiales y con la canción «Labios compartidos» .