Hazte premium Hazte premium

La increíble historia de Miles Copeland, el padre del batería de The Police que fue agente de la CIA

Su hijo Stewart ha creado un podcast en el que habla sobre sus trabajos como espía para desestabilizar Oriente Medio

Stewart Copeland ABC

Nacho Serrano

Stewart Copeland , uno de los mejores bateristas del mundo y miembro del legendario trío The Police , nació en Viriginia (Estados Unidos) en 1952, pero pasó su infancia en Oriente Medio. Su familia se marchó a vivir a El Cairo (Egipto) al poco de venir al mundo, y en 1957 se instaló en Beirut (Líbano). Allí comenzó a aprender a tocar su instrumento a los ocho años, y con doce ya daba conciertos con la banda The Nomads en el American Beach Club de la capital libanesa, siempre empapando su estilo con los ritmos árabes que después le distinguirían del montón en la escena pop. En ese momento no sabía exactamente cómo se ganaba el pan su padre, que había sido trompetista y había trabajado con artistas del calibre de Glenn Miller, pero cuando lo descubrió, todas las piezas encajaron. Viajaban tanto porque su padre tenía una profesión muy particular: era nada menos que espía de la CIA.

Copeland ha hablado con The Guardian sobre este episodio de su vida, en el que sin saberlo, probablemente debió correr peligro. Su padre, Miles Copeland, tenía la misión de desestabilizar la región a través de diferentes operaciones de espionaje . Tuvo un papel importante en el cese de varios cargos políticos en Irán y Siria, sus dos principales objetivos, y se codeaba con importantes figuras como el presidente Nasser de Egipto o el espía soviético Kim Philby, cuyos hijos se hicieron amigos del pequeño Stewart durante aquellos años en Beirut.

Miles Copeland ya habló sobre su pasado como espía en una entrevista con Rolling Stone en 1986, en la que dejó una revelación bastante esperpéntica que debió poner en un brete a su hijo y a sus compañeros de The Police: no se le ocurrió otra cosa que decir que el grupo era en realidad una especie de comando de operaciones psicológicas (psy-ops en inglés) que inoculaba mensajes subliminales a través de sus letras. Ahora su hijo se carcajea con aquella anécdota, pero sabe que la peligrosa forma de vida de su padre fue de película, y ha intentado llevarla al cine. Sin embargo, ha habido problemas con la financiación ya que le exigían que el filme tuviera alguna conexión con The Police, algo que Stewart no iba a aceptar de ninguna manera. Así que ha convertido la historia en un podcast de nueve capítulos que se puede escuchar en la plataforma Audible.

El padre de Stewart, Miles Copeland Jr, nació en Birmingham, Alabama, en 1916. Durante la segunda guerra mundial fue un agente estadounidense destinado en Londres, donde estuvo involucrado en la campaña de desinformación que precedió al día D , y se casó con una agente de inteligencia escocesa llamada Lorraine Adie, quien luego se convirtió en arqueóloga (y madre de Stewart). Cuando terminó la guerra, Miles se convirtió en uno de los primeros reclutas de la CIA y fue enviado a Siria, volviendo a Oriente Medio en sucesivas misiones, las últimas acompañado por toda su familia.

Después de dejar la CIA en 1957, Miles se convirtió en un consultor bien remunerado y ejerció de periodista, y su familia nunca supo a qué se había dedicado hasta que lo contó todo en el libro «El juego de las naciones» , que se convirtió en un éxito de ventas. Stewart asegura que no sintió rencor al conocer la verdadera historia de su padre, «No nos mintió, simplemente no nos contó toda la historia. La verdad es que nunca preguntamos. Puede sorprender, y a mí me sorprende, que lo cierto e que no pensamos tanto en eso». De hecho, en su podcast, el socio de Sting muestra de forma transparente la admiración que siente ahora por su padre, enfatizando el astuto encanto sureño que le sirvió a Miles para medrar como espía siendo a la vez padre de familia.

Stewart Copeland ABC

Aunque la CIA se ha visto salpicada constantemente de escándalos y no siempre ha tenido buena prensa entre los jóvenes, Stewart asegura que siempre pensó que el padre de su trabajo era algo «muy molón». « Creo que a nuestras espaldas la gente describía a los Copeland como monstruos de derecha , pero me llevaba bastante bien con todo el mundo», asegura. Incluso cuando era famoso, salvo excepciones: «Décadas más tarde, recuerdo haber pasado el rato con Rage Against the Machine, y Zack de la Rocha me estaba mirando de manera rara, pero los otros chicos eran amigables. Su principal problema era que jugaba al polo». Quién sabe, quizá De la Rocha no viera a Copeland con buenos ojos porque se informó sobre su padre y encontró esta declaración en su famosa entrevista con Rolling Stone: « Mi única queja con respecto a la CIA es que no está derrocando suficientes gobiernos antiamericanos o asesinando a suficientes líderes antiamericanos, pero supongo que me estoy haciendo viejo».

En cualquier caso, Stewart recuerda con cariño aquella época en El Líbano. Ahora mismo está intentando localizar a sus viejos amiguitos de Beirut , los hijos del espía Philby, para retomar la relación.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación