Carmen Linares: «Es un puntazo que Serrat diga que cantar conmigo es un honor para él»
La cantaora celebra en el madrileño Inverfest sus 40 años en el flamenco con la compañía del célebre cantautor catalán
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesión«Tú has nacido para cantar. Hay muchas mujeres que pueden ser secretarias u otra cosa, pero a ti Dios te ha dado ese don para que lo ejercites. No seas tonta, ni te lo pienses, ejerce tu profesión», insistía el padre de Carmen Linares ... (Linares, Jaén, 1951), de profesión ferroviario, mientras tocaba tranquilamente la guitarra en la puerta de su casa y ella le acompañaba con una seguiriya o una soleá. Era solo una niña, pero ya soñaba con seguir la estela de la Niña de los Peines, las hermanas Bernarda y Fernanda de Utrera o la Niña de la Puebla.
Lo que no se imaginaba entonces la joven Carmen es que, décadas después, ‘The New York Times’ destacaría su «extraordinario poder expresivo», que actuaría en los escenarios más prestigiosos del mundo –como el Teatro Colón de Buenos Aires, la Ópera de Sydney, el Royal Albert Hall de Londres, el Teatro Nacional Chaillot de París y el Teatro Real de Madrid– y que acabaría siendo reconocida como una de las grandes cantaoras de la historia, a la altura de compañeros de generación como Enrique Morente y Camarón de la Isla.
Su carrera, que ha sido también reconocida con la Medalla de Oro de las Bellas Artes y el premio Nacional de Música del Ministerio de Cultura, le tiene reservada ahora una nueva sorpresa: el concierto que dará el miércoles 19 de enero, en el Teatro Circo Price dentro de Inverfest ( 20.00 horas ), acompañada de Joan Manuel Serrat . «¡Imagínate! Para mí es un puntazo que Serrat haya dicho que venir a Madrid a cantar conmigo es un honor para él. Cuando le pregunté si quería colaborar en mi concierto, estuvo supercariñoso y aceptó rápidamente. Fue un subidón, una alegría muy grande, porque ha formado parte de mi vida», comenta a ABC, sobre este espectáculo llamado ‘40 años de flamenco’, con el que recorrerá España y tendrá a otros invitados especiales aún no desvelados.
'La saeta'
Serrat llega a Madrid un mes después de anunciar su retirada de los escenarios, con una gira que comenzará el 27 de abril en el Beacon Theatre de Nueva York y finalizará el 23 de diciembre en el Palau Sant Jordi de Barcelona. De hecho, ‘La saeta’ de Antonio Machado que interpretará junto a la cantaora en Madrid será la última vez que veamos al cantautor catalán sobre un escenario antes de iniciar su periplo de despedida por el mundo.
«Serrat ha marcado nuestros caminos por su forma de entender el arte. Esta saeta, además, es uno de los temas más emblemáticos de su carrera. Con él demostró la profunda admiración que sentía por Machado, la misma que siento yo. Es un tema universal y no solo para mí. He hablado con muchos cantaores y guitarristas y a todos les encanta, aunque no sea una saeta flamenca tradicional. Tampoco tendría sentido que Serrat hiciera una saeta tradicional, porque esa ya está hecha por muchos cantaores desde hace un siglo, pero consiguió que la suya tuviera una música especial y un estilo propio. Ha conseguido que ese carácter y esa solemnidad sigan estando ahí», asegura Linares.
La cantaora ofrecerá un recital de cante y baile en el que también homenajeará a figuras como Paco de Lucía, Enrique Morente o Mercedes Sosa, repasará las adaptaciones que ha realizado a lo largo de su carrera de poetas como Federico García Lorca e interpretará los grandes clásicos de su ‘ Antología de la mujer en el cante ’ (PolyGram, 1996). Un trabajo que la crítica consideró como uno de los diez mejores discos de la historia del flamenco, en el que recogía cantes olvidados de cantaoras antiguas, y que realizó junto a guitarristas como Tomatito , Vicente Amigo, Pepe Habichuela o Rafael Riqueni.
Feminista
Aunque mucha gente quiso ver en ese álbum una reivindicación feminista, Carmen Linares no lo concibió como tal. «Todavía en la actualidad me siguen diciendo que significó un paso adelante para el movimiento feminista dentro del flameco, pero se convirtió en eso sin pretenderlo. Yo siempre respondía: ‘Si lo consideráis feminista, me parece bien’. Entiendo que hay que luchar por la plena igualdad, pero en el flamenco creo que la mujer siempre estuvo considerada. Lo importante es que nunca leí una mala crítica y muchas cantaoras posteriores me han dicho que fue una de sus grandes influencias. Hasta los flamencólogos estaban contentos de que hubiera reivindicado a cantaoras como La Mejorana, Rosa la Papera, Rosario del Colorao o la Niña de los Peines».
Nunca antes una mujer había grabado una antología, a diferencia de otros cantaores como Antonio Mairena. «También fue la primera vez que se reivindicaron cantes creados por cantaoras. Fue una doble aportación y es verdad que me consolidó. Tengo que reconocer que, aunque he hecho otras cosas muy importantes con otros grandes como Manolo Sanlúcar o Gerardo Núñez , y grabado las canciones populares de Lorca, que me abrió una camino muy importante, la antología es sin duda el disco de mi vida. Lo más interesante es, sin embargo, que ninguno de los trabajos tenía que ver con el anterior… siempre fui sumando», explica. Y, al final, advierte: «Es probable que si no hubiera tenido la valentía y la curiosidad de hacer todas esas cosas nuevas, hoy no estaría cantando con Serrat».
Noticias relacionadas
Límite de sesiones alcanzadas
- El acceso al contenido Premium está abierto por cortesía del establecimiento donde te encuentras, pero ahora mismo hay demasiados usuarios conectados a la vez. Por favor, inténtalo pasados unos minutos.
Has superado el límite de sesiones
- Sólo puedes tener tres sesiones iniciadas a la vez. Hemos cerrado la sesión más antigua para que sigas navegando sin límites en el resto.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete