El cantaor Enrique Morente presenta «El pequeño reloj», su disco más singular

Pero no quedan en lo reseñado los experimentalismos de Enrique Morente en esta ocasión, porque incluye un tema, titulado «Caramelo de Cuba», en son de bolero, y un «Alegato contra las armas» sobre una sonata de Beethoven, con el piano de Javier Limón, así como unos cantes acompasados con palmas sordas «para Lula, esperanza de Brasil», que además de significar la nota política que implica la dedicatoria, están tratados con efectos tecnológicos bien sugerentes.

Otra de las novedades de «El Pequeño Reloj», la constituye la interpretación sui géneris del poema de ese título original de León Felipe -«He aquí otra manera de medir/ y gira y gira el llanto sin cesar./ Como el rosario, como la noria,/ como el mundo, como la espiral...»-, un poema que Enrique Morente aflamenca casi musitándolo y lo dota de musicalidad, mientras que a los versos que escoge de Bécquer, musicados por Javier Limón, los «dice» por bulerías.

Mas no faltan en «El Pequeño Reloj» el cante tradicionalmente expresado, pues junto a los ajustados a los toques referidos de Montoya o Manolo de Huelva, y otros grabados con la sonanta de Sabicas, en este disco para aficionados abiertos a la evolución y seguidores de Morente -de comercial no tiene nada-, se escuchan unas alegrías con la guitarra de Pepe Habichuela -perteneciente a un disco de años atrás-, la recuperación de la policaña, estilo en desuso, y otros cantes bien personales con las guitarras de Tomatito y Niño Josele. Enrique Morente, como siempre reconoce en sus declaraciones, está satisfecho de haber dado con «El Pequeño Reloj», una muestra más de su inquietud artística, de su interés por ampliar el mundo musical del flamenco partiendo de sus valores más genuinos.