Diez temas que hay que aprenderse para ir preparados al concierto de AC/DC
AC/DC, posando para el disco «Highway to Hell» - abc

Diez temas que hay que aprenderse para ir preparados al concierto de AC/DC

Con más de cuarenta años de carrera, la banda anglo-australiana atesora un repertorio inapelable. Estos son algunos de los himnos que no faltarán en sus citas de Barcelona y Madrid

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Con más de cuarenta años de carrera, la banda anglo-australiana atesora un repertorio inapelable. Estos son algunos de los himnos que no faltarán en sus citas de Barcelona y Madrid

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  1. «Highway to Hell»

    AC/DC, posando para el disco «Highway to Hell» - abc

    No podíamos empezar de otra manera que con el que quizás sea el tema más conocido de AC/DC. Pertenece al disco del mismo título, de 1979, el que puso a la banda en la autopista hacia la gloria. Pero también, efectivamente, hacia el infierno. Seis meses más tarde moría Bon Scott dentro de un coche, aunque no precisamente en un accidente. Desde la portada, el diablo Angus nos saluda, dando inicio a un completamente imprescindible en los conciertos, los cuernos.

  2. «Let There Be Rock»

    La religión del rock tiene en AC/DC sus grandes gurús - abc

    Es uno de los momentos cumbres en cualquier concierto de AC/DC. Y de la vida de cualquier fan de la banda presente, podríamos decir. Empieza a sonar la batería, interrumpida enseguida por las guitarras y ese fondo que ya no parará hasta que dejen solo a Angus para se explaye. Desde esos primeros compases se entra en un túnel de música endemoniada que dura casi veinte minutos. Un huracán que parece no acabar nunca, para goce infinito del público. Es el momento de mayor gloria de Angus, que, poseído por el rock, corre, sube, baja, se tira al suelo, hace el paso del pato... sin parar de tocar nunca (salvo leves interrupciones para dar más emoción al asunto). Pertenece al disco de 1977 del mismo título, y la grabación del videoclip se hizo en una iglesia australiana, y Bon Scott aparece vestido de sacerdote impartiendo la doctrina del rock. Al final, pega un salto cuya conclusión no se ve, pero fue una pierna rota.

  3. «Hells Bells»

    Las campanas del infierno llaman al compañero caído - abc

    La campana de «Hells Bells» tañe desde el infierno por Bon Scott. No puede faltar este atrezzo desde la gira de conciertos de «Back in Black», de 1981. AC/DC había enterrado a su cantante y se enfrentaba a una nueva etapa con Brian Johnson. El resultado fue el álbum de más éxito de la banda, con más de cuarenta millones de copias vendidas. Todo él es un homenaje al compañero caído.

  4. «Back in Black»

    AC/DC regresó en 1980 de negro riguroso - abc

    Continuamos con el mismo disco que en el tema anterior. Es decir, «Back in Black». Es un explícito homenaje a Bon Scott y todo un canto a la continuidad del grupo: «Olvídate del coche fúnebre porque nunca moriré». «Porque he vuelto, sí, he vuelto de negro». Dicen que es la primera canción que Kurt Cobain aprendió a tocar en una guitarra.

  5. «Thunderstruck»

    El martillo del rock - abc

    Otro momento importante del directo. El martillo del rock cae de forma inmisericorde sobre las cabezas del público con este himno escrito para «The Razors Edge» (1990). Por aquel entonces resultaba evidente que AC/DC les hacía falta encontrar de forma urgente un tema que pudiera competir con su repertorio histórico. Con «Thunderstruck» lo consiguieron.

  6. «Whole Lotta Rosie»

    AC/DC la arma bien gorda - abc

    Otro de esos momentos impagables en el espectáculo ofrecido por AC/DC: la muñeca hinchable bailando al fondo. «Whole Lotta Rosie» forma parte de «Let there be rock» (1977), y la historia del tema parte de una apuesta: sus compañeros desafiaron a Bon Scott a ligarse a la tal Rosie, a una chica de enormes dimensiones procedente de Tasmania. El cantante de la formación, que no había reto que no superara por peligroso que fuera, no solo lo consiguió, sino que consideró que la experiencia había sido tan satisfactoria que no podía menos que trasladarla a una canción.

  7. «You Shook Me All Night Long»

    Toda la noche trabajando de forma placentera - abc

    Otro poderoso tema perteneciente a «Back in Black», y una de las más populares de la banda. Fue la primera canción que escribió Brian Johnson para AC/DC (¡vaya forma de empezar!), y comentó que la inspiración le vino al contemplar a unas chicas en las Bahamas.

  8. «For Those About To Rock (We Salute You)»

    El saludo de los gladiadores del rock - abc

    El mensaje de las canciones de AC/DC está claro: viva el rock & roll. Es otro de esos temas que ha puesto nombre a un álbum completo, «For Those About to Rock (We Salute You)» (1981). Aquí es donde entran en juego los cañonazos, por si los oídos del público no estuvieran suficientemente castigados a esas alturas del concierto. Pero sí, castigo divino para los acólitos del rock que corean el estribillo encantados y completamente identificados. Por cierto, la idea de usar los cañonazos nació al escucharlos en la televisión durante la boda del Príncipe Carlos con Diana Spencer.

  9. «Dirty Deeds Done Dirt Cheap»

    Asuntos sucios a bajo coste - abc

    Esta también va a caer, así que hay que aprendérsela. Pertenece a su tercer álbum de estudio, «Dirty Deeds Done Dirt Cheap» (1976), y Angus se inspiró en un personaje de dibujos animados llamado Dishonest John, el malo de la serie, que portaba una tarjeta de visita que ponía exactamente esa frase, «Se hacen actos sucios muy baratos», seguida de «festivos y domingos, precios especiales». Más de uno y de dos han relacionado jocosamente la canción con su histórico batería, Phil Rudd, acusado de contratar a un sicario para que cometiera dos homicidios (al final, se desestimó este cargo por falta de pruebas, pero el músico se declaró culpable de amenazas de muerte y posesión de drogas).

  10. «Rock or Bust»

    La nueva incorporación al repertorio - abc

    Así comenzará el concierto, con el tema que da título a su último álbum. El tiempo dirá si se convierte también en un clásico de la banda (la competencia es muy dura), pero hay que reconocer que tiene los elementos característicos de la contundencia de AC/DC. En estas imágnes se echa de menos, y se echará en el concierto, a Malcolm empuñando la guitarra rítmica. Resulta casi impensable ver al grupo sin su constante movimiento de cabeza y su forma perfecta de acompañar a Angus, de colocar esa alfombra eléctrica sobre la que volaba su hermano. En fin.

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