Novias y mártires del rock
Jagger, junto a Chrissie Shrimpton - abc

Novias y mártires del rock

No han sido pocas las parejas de estrellas del rock que, como L’Wren Scott, han caído en espirales autodestructivas y tendencias suicidas. Recordamos diez casos trágicos, algunos relacionados con el propio Mick Jagger

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

No han sido pocas las parejas de estrellas del rock que, como L’Wren Scott, han caído en espirales autodestructivas y tendencias suicidas. Recordamos diez casos trágicos, algunos relacionados con el propio Mick Jagger

12345678910
  1. Chrissie Shrimpton

    Jagger, junto a Chrissie Shrimpton - abc

    En una reciente entrevista con ABC, Chris Jagger contaba que su hermano Mick estaba en La India disfrutando de un viaje «musical y espiritual» con su novia L’Wren Scott. Aquel pequeño paréntesis de relax para la pareja, que llegó a publicar varios selfies de su travesía en las redes sociales, sería prácticamente el último. Mick volvió a enrolarse en la gira de los Rolling y poco después se desencadenaría la tragedia, otro nuevo capítulo en el historial de relaciones con final turbulento de los artistas más venerados del rock’n’roll. Sin poder penetrar en las intrahistorias de los amoríos de las megaestrellas, sin conocer los detalles, da la sensación de que en el pasado, el machismo imperante y las presiones de los medios pudieron favorecer ciertos complejos de inferioridad en las «novias de», que las empujaron a caer en espirales autodestructivas o de ausencia de autoestima. Es más que probable que éste no sea el caso, el cantante estoniano ya tiene una edad y seguramente la respetaba al cien por cien (si es que no había roto con ella, como afirma el New York Post), y la diseñadora quizá tenía otros problemas. Pero no deja de ser inquietante que Jagger y otros astros del rock hayan tenido tantas parejas con tendencias suicidas.

    Chrissie, la primera novia seria de Mick Jagger (él tenía 19, ella 17), también acabó jugando con la muerte al sufrir el salto a la fama de su deseadísimo chico. En cuanto se hizo popular, Mick dejó de coger su mano al caminar por la calle y le ordenaba alejarse cuando se acercaban fans, algunas de los cuales llegaron a agredirla físicamente. El éxito creó una barrera entre ellos, las infidelidades se hicieron constantes y según contó Shrimpton años más tarde, un día le amenazó con dejarle y él «se arrodilló y pidió perdón sollozando». Llegaron a estar prometidos, pero entonces apareció Marianne Faithfull. «Me la quiero follar», dijo Jagger al verla en una fiesta, sin importarle que su prometida estaba a su lado escuchando. Poco después la pareja sobrevivió a un extraño accidente de coche. Cuando se enteró de que lo de Mick y Marianne iba en serio, Chrissie se sometió a una sobredosis de somníferos que la hubiera matado, de no ser por alguien («no sé si fue Mick, o algún amigo suyo») que la recogió del suelo de su habitación y la dejó en el Hospital St. George, registrada bajo un alias eso sí, para no dar un espectáculo a la prensa. Mick dio la relación por terminada. Pero meses después se presentó ante Chrissie «con ganas de sexo» y… ella no pudo rechazarlo. Al final rompieron definitivamente y la joven comenzaría una relación con Steve Marriott, de Small Faces, que le dio algo de estabilidad. Jagger se inspiró en ella para escribir «Yesterday’s Papers» («Who wants yesterdays papers, Who wants yesterdays girl / Seems very hard to have just one girl, When there's a million in the world») y otras canciones de contenido algo misógino, como «Under my thumb», «Stupid Girl» o «18th nervous breakdown».

  2. Marianne Faithfull

    Mick Jagger, con Marianne Faithfull

    Nada más conocerla, Mick y Keith le escribieron «As tears go by», y ella enseguida empezó a salir con el cantante, con quien compuso «Sister Morphine», escrita durante su estancia hospitalaria tras uno de sus primeros intentos de suicidio en 1967, aún estando con él. Pero al romper la relación fue cuando Faithfull cayó en un abismo de drogas, nuevos intentos de suicidio, anorexia nerviosa y depresión, que terminó abocándola a una vida de «homeless» en las calles del Soho londinense durante finales de 1970 y principios de 1971. Sus amigos fueron quienes la rescataron de la indigencia y la ingresaron en rehabilitación, donde con mucho esfuerzo logró superar sus dos adicciones: las drogas y Mick Jagger.

  3. Anita Pallenberg

    Anita probó suerte con casi todos los miembros de los Stones, en la imagen con Jagger y Richards

    Pudo haber sido la «Yoko» de los Stones, ya que su presencia a punto estuvo de acabar con la banda. Sus encantos sembraron la discordia en el seno del grupo, pero ella también se llevó sus disgustos… Anita conoció a sus satánicas majestades al colarse en un camerino para ofrecerles marihuana, y muy pronto comenzaría una relación con Brian Jones. Cuando el músico cayó en la más severa de las drogadicciones, ella empezó a sufrir golpes e insultos, y durante un viaje a Marruecos Jones se puso demasiado violento y le dejó la cara totalmente amoratada. Entonces Anita se refugió en los brazos de Keith Richards, y Jones y el guitarrista se dejaron de hablar. Poco después, Pallenberg sería la sustituta de Marianne Faithfull en la cama de Jagger (lo que a su vez erosionaría la relación de éste con Richards). Algo que por cierto, quedó registrado en la mítica película erótica protagonizada por la pareja, proyectada en un festival de Amsterdam.

  4. Pamela Courson

    Pamela Courson con Jim Morrison

    Cuando tenía 19 años, Jim Morrison se le acercó y le dijo «Tú eres la elegida». No es de extrañar que cayese rendida a sus pies y soportara los inconvenientes de la fama y el estrellato. Su relación fue especialmente tormentosa, con conocidas escenas de peleas y gritos en público, infidelidades varias y noches de alcoholismo extremo. Jim le dedicó «Queen of the highway». Al final, Courson terminó siendo otra víctima del noviazgo rockero, ya que falleció de sobredosis tres años después de la muerte de Morrison.

  5. Cyrinda Foxe

    Cyrinda con Bowie

    Verdadera todoterreno en esto de los amoríos rockeros, Foxe trabajaba en el Max Kansas City y se relacionaba mucho con Warhol y toda la tropa de la Factory. Allí conoció a David Bowie, que la dejó embarazada, pero al comprobar que el duque blanco no tenía la menor intención de ser padre, decidió abortar. Sale en el vídeo de «Jean Genie» de Bowie. Después se emparejó con un verdadero locatis del rock’n’roll, David Johansen de los New York Dolls, con quien se graduó en consumo de heroína. Después, como quien dice, saldría de Málaga para meterse en Malagón al ennoviarse con Steven Tyler de Aerosmith, a cuyo lado permaneció durante los años más salvajes de la vida del cantante, aguantando maltratos y excesos inenarrables durante tanto tiempo que le dieron material para un libro, « Dream On».

  6. Bebe Buell

    Buell, abrazada a Steven Tyler

    Después de salir con Jimmy Page, Mick Jagger, David Bowie e Iggy Pop (quien se enamoró de ella cuando le curó las heridas que él mismo se hizo con una botella rota en el pecho durante una actuación), acabó en brazos de Todd Rundgren. Pero en 1976 tuvo una aventura con Steven Tyler de la que salió escaldada. Él la pegó más de una vez y la obligaba a convivir con constantes bacanales de drogas y alcohol, que a veces incluían escandalosas humillaciones en público. Tan atemorizada quedó por la actitud del cantante de Aerosmith que cuando éste la dejó embarazada, trató de ocultar que el bebé era suyo. La llamó Liv Rundgren, haciendo creer al mundo que era de su novio Todd, y trató de alejarla lo más posible de su verdadero padre para protegerla de su vida de desenfreno. Pero cuando se descubrió el pastel, la niña decidió adoptar el nombre que le correspondía: Liv Tyler. Steven Tyler le dedicó el tema «What it takes».

  7. Devon Wilson

    Wilson con Jimy Hendrix

    En 1965 se enamoró perdidamente de Jimi Hendrix y establecieron una relación supuestamente basada en el amor libre. Pero el entorno del guitarrista sabía que ella era muy posesiva, que en realidad se mordía el labio ante los affaires de su novio. Así que se tomó una especie de venganza: en el 27 cumpleaños de Jimi (el último que celebraría), Wilson abandonó la fiesta para acostarse con Mick Jagger. Sin embargo, cuando Hendrix falleció meses más tarde, ella no pudo soportarlo y cayó en una profunda adicción a la heroína que también provocó su vuelta al mundo de la prostitución. Tres meses después, caería «misteriosamente» desde su ventana del Hotel Chelsea de Nueva York, muriendo en el acto. Hendrix le dedicó la canción «Dolly Dagger»

  8. Savannah

    Savannah, con Slash

    El salto temporal que hay respecto a los anteriores casos demuestra que con el tiempo, este tipo de relaciones fueron cambiando y las estrellas fueron mostrando más respeto hacia sus parejas, o al menos el desprecio en público empezó a estar muy mal visto, se ocultaba más y se hacía menos gala de ello (desde los ochenta hay menos letras del estilo «Yesterday’s papers»). Es cierto que Shannon Wilsey, alias Savannah, ya estaba acostumbrada a ciertos comportamientos misóginos al ser una actriz porno, pero no pudo soportar la falta de compromiso de sus novios rockeros. Primero se enamoró locamente de Slash, guitarrista de Guns ‘N’ Roses, pero cuando éste la abandonó sus problemas con las drogas se tornaron insostenibles. Intentó rehacer su vida con Vince Neil de Mötley Crüe, pero la dejó porque ella insistía demasiado en casarse. Un año después se suicidaría pegándose un tiro en la cabeza, minutos después de estampar su Corvette contra un árbol. Okkervil River le dedicó este tema.

  9. Paula Yates

    Yates con Michael Hutchence

    Se divorció de Bob Geldof tras enamorarse de Michael Hutchence de INXS, pero cuando éste se suicidó, no tardó en seguirle. En 1999 intentó acabar con su vida del mismo modo que él, ahorcándose con un cinturón, pero no lo consiguió hasta un año más tarde, sobredosis de heroína mediante. Se dice que Hutchence se sinpiró en ella para «Show me (Cherry Baby)»

  10. Courtney Love

    Courtney Love y Kurt Cobain

    Con Courtney y Kurt, bueno… en realidad no sabemos quién hizo sufrir más a quién. Tampoco quién se drogaba más, quién agredía más al otro (un caso parecido al de Sid y Nancy a finales de los setenta). Y es que la mente disparatada de Love ya venía de serie antes de convivir con una superestrella. Es cierto que desde la muerte de Cobain sus chifladuras no han hecho más que ir en aumento (la última, asegurar por Twitter que ella sí sabe dónde está el 777 de Malaysia Airlines), y no parece haberse rehabilitado de sus adicciones. Pero aun siendo la más autodestructiva de la lista, sigue viva y coleando. Kurt, del que este año se cumplen los 20 años de su muerte, le dedicó «All Apologies»

Ver los comentarios