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¿Tendríamos que pagar por cantar «Cumpleaños Feliz»?

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El litigio que mantiene Warner/Chappell Music sobre los derechos de autor de « Cumpleaños Feliz » con la cineasta Jennifer Nelson , ha llevado a la empresa a declarar ante los tribunales federales de Manhattan.

La noticia que avanzó The Hollywood Reporter , ha supuesto el rastreo de los orígenes de la composición hasta llegar a una maestra de escuela llamada Patty Smith Hill , que podría haberla compuesto junto a su hermana Mildred Hill a finales del siglo XIX.

Como tal, la demanda busca que confirmar que, si « Cumpleaños Feliz» tuvo alguna vez un Copyright válido , este venció como tarde en 1921. Además, se recalca que si Warner/Chappell posee algún derecho sobre la canción, solo se limitarían a la reproducción y distribución de los arreglos de piano confeccionados para su publicación en 1935.

La demanda pretende descubrir el recorrido musical de la canción, que incluye al músico Rupa Marya y al cineasta Robert Siegel , a los que las hermanas Hill escribieron una composición en 1893 titulada « Good Morning to All », y que luego vendieron sus derechos a Clayton Summy a cambio del 10 por ciento de ventas al por menor. No obstante, se argumenta que durante las siguientes décadas, las variaciones de la canción creada por las hermanas desembocaron en la célebre canción conocida por todos .

En su defensa, Warner/Chappell dice que la demanda carece del quién, qué, cuándo, dónde y cómo de cualquier conducta fraudulenta sobre los derechos de «Cumpleaños Feliz» . Además, los acusados no sólo buscan que la demanda sea reducida por tener un juez que rechace las alegaciones basadas en las leyes estatales. Si la Ley de Derecho de Autor se aplica, significaría que estaría sujeta a un período de prescripción de tres años, que prohibiría a ciertos implicados como Siegel ser una parte de la demanda.

Embrollo legal

La estratagema legal parece diseñada para limitar la responsabilidad de Warner/Chappell y poner a prueba la voluntad de los abogados de los demandantes. Suponiendo que el juez acepte la moción del acusado, la presentación de una demanda más modesta sería el camino a seguir en pos de que «Cumpleaños Feliz» sea de dominio público.

Esta duda no se resolverá hasta que un juez tome una decisión sobre la moción de desestimación. Porque lo que está en cuestión no es lo que ocurrió hace un siglo, sino lo que ha ocurrido más recientemente . Por el momento, los trabajos de Warner/Chappell indican que si los demandantes quieren mantener sus pretensiones de mucho dinero, van a tener que hacer más trabajo.

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