Muere el payaso y cómico estadounidense Jango Edwards a los 73 años

En el mundo de la comedia, Stanley Ted Edwards, conocido artísticamente como Jango Edwards, dejó una huella imborrable. Su estilo, que combinaba provocación y ternura, revolucionó el lenguaje del payaso contemporáneo, siendo uno de los principales impulsores del movimiento 'clown power' y del denominado 'nouveau clown'. Además, logró contagiar la risa a varias generaciones, dejando un legado que perdurará en el tiempo.

Fue una figura influyente y respetada dentro de su disciplina artística. Grandes cómicos como Leo Bassi, Johnny Melville, Andreu Buenafuente y Guillem Albà lo consideran su mentor y fuente de inspiración.

Nacido en Detroit, Estados Unidos, en 1950, Jango Edwards comenzó trabajando en una empresa de paisajismo, pero pronto se dio cuenta de que su verdadera pasión estaba en otro lugar. En los años sesenta, se embarcó en una búsqueda personal que abarcaba temas como el amor libre, la filosofía, la política y la religión. Fue el libro 'El cuarto camino', de Georges Gurdjieff, el que le abrió los ojos al mundo del clown, como él mismo ha dicho en entrevistas.

En la década de los 70, Jango Edwards se mudó a Europa y comenzó su carrera en Inglaterra con la London Mime Company. Después, fundó su propia compañía, inicialmente llamada Dog Breath Theatre Group y posteriormente rebautizada como Friends Roadshow. Junto a la payasa Nola Rae, cofundó la Friends Roadshow, y participó en la organización del histórico Festival of Fools en Ámsterdam, un evento trascendental para el mundo del 'clown' y donde participaron figuras destacadas como Johnny Melville o Tortell Poltrona.

Finalmente, se estableció en Barcelona, donde dejó una profunda huella y consideró su hogar. Durante las décadas de los 80 y 90, Jango Edwards creó espectáculos revolucionarios que lo catapultaron a la fama, como 'Garbage' y «Holey Moley», este último incluso fue grabado y emitido por la televisión nacional de Francia, país en el que también vivió durante largos periodos.

A lo largo de su carrera, Jango Edwards trabajó incansablemente en diversos países como Australia, Estados Unidos y Colombia, incluso actuó en los Juegos Olímpicos de Barcelona en 1992, junto a Johnny Melville, Leo Bassi y Ángel Pavlovsky. Continuó creando espectáculos como 'Klones' (1994), 'Mum' (1996) o 'Tony Balony' (1999). A principios del nuevo siglo, se estableció en Barcelona, donde en 2004 dirigió un espectáculo de gran formato en el Fórum Universal de las Culturas.

Jango Edwards dejó un impacto duradero en el mundo del arte del payaso y la comedia, dirigiendo a reconocidos artistas y siendo aplaudido por personalidades como Catherine Deneuve, Pierre Richard, Bono de U2, los Rolling Stones, Francis Ford Coppola y Federico Fellini.

En 2022, anunció públicamente que padecía un cáncer incurable, pero no dejó que la adversidad le arrebatara su sentido del humor. En entrevistas, se rió abiertamente de su propia muerte, demostrando su espíritu alegre y juguetón hasta el final.