Wert: «Es un día triste para las letras españolas»

Se trataba, ha subrayado, de «una gran escritora catalana en español», y en ese sentido «es un día muy triste para las letras españolas». El ministro ha considerado a Matute como «probablemente la figura más emblemática de una generación» enmarcada en la posguerra, lo que la obligó a «enfrentarse a enormes dificultades ambientales en su trabajo creativo».

Pese a ello, Ana María Matute «fue capaz de desarrollar una literatura de alta calidad, incluso una cierta literatura hermética con claves a las que llegaba solo el lector avisado en una línea de realismo narrativo». El ministro ha hecho hincapié en la «disciplina de creación literaria verdaderamente excepcional» que tenía Matute y que «mantuvo hasta el último día. «Era una persona que sorprendía por su extraordinaria alegría de vivir y su extraordinaria vitalidad», ha añadido.

El consejero de Cultura de la Generalitat, Ferran Mascarell, ha alabado la figura de la recién fallecida Ana María Matute y ha destacado a la escritora por «la aportación de sensibilidad que hizo a las letras castellanas hechas desde Cataluña». Aprovechando una intervención este miércoles en el Parlamento catalán durante la sesión de control al Govern, Mascarell ha destinado sus primeras palabras a recordar la escritora barcelonesa, muerta a los 88 años de edad.

Matute estuvo nominada al premio Nobel, ganó grandes premios literarios –entre ellos el Cervantes, el Nacional de Literatura y el Planeta– y destacó también por ser la tercera mujer en ingresar en la Real Academia Española (RAE) en sus 300 años de historia.

El editor de Destino, Emili Rosales, ha lamentado la muerte hoy de su amiga Ana María Matute , quien considera es autora de «una literatura de los sentimientos, del dolor y los ensueños, con un estilo penetrante y poético». Ha destacado «su capacidad para dar la apariencia de lo fácil y lo sencillo a lo que es complejo, algo muy meritorio en la literatura».

En declaraciones a Efe, Rosales ha indicado que se trata de un «referente de las letras españolas de las últimas décadas y una de las más destacadas de su generación, que fue la que renovó la novela española de la posguerra». Matute tenía la virtud «de combinar los reconocimientos académicos de máximo nivel con el cariño y el amor de sus lectores, así como de muchísimos colegas y amigos de la profesión».

«Se sentía catalana, pero siempre dijo que el castellano era una lengua universal»La presidenta de la comisión de igualdad, Carmen Quintanilla, ha destacado el papel de la escritora catalana Ana María Matute como representante y defensora de la mujer en el mundo de las letras y de la literatura, «sin militar en el feminismo literario». Así lo ha asegurado en declaraciones a Europa Press la también diputada del Partido Popular, quien ha elogiado a su vez el papel de Matute como «brillante escritora». «Se sentía catalana, pero siempre dijo que la lengua castellana era una lengua universal y siempre escribió en castellano y eso no menoscabó que fuera académica», ha sentenciado.