La Galería de los Uffizi declara la guerra a los selfis tras los daños causados por un turista: «Son una plaga»
Un visitante rasgó un cuadro al intentar hacerse una foto, lo que ha obligado al museo a retirarlo, suspender la exposición y adoptar medidas de protección más eficaces
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La Galería de los Uffizi, uno de los templos del arte más visitados del mundo, ha dicho basta a los 'selfi-clientes'. Simone Verde, su director, ha declarado la 'guerra' a la creciente multitud de visitantes que acude a los museos no para contemplar ... el arte, sino para convertirlo en fondo escenográfico de contenidos para redes sociales.
La chispa, una más en una larga cadena de episodios lamentables al patrimonio cultural, ha sido un gesto aparentemente banal: un turista italiano, intentando imitar la postura del Gran Príncipe Ferdinando de Medici retratado por Anton Domenico Gabbiani, ha dado un paso atrás, ha tropezado con una plataforma de distanciamiento y ha caído sobre la obra, rasgando la tela. El incidente ocurrió en plena exposición dedicada a las 'Artes del siglo XVIII', una muestra cuidadosamente montada por los Uffizi para dar relieve a la estética refinada de esa época.
El daño, aunque catalogado como leve por los restauradores, ha obligado a retirar el cuadro de inmediato ya suspender toda la exposición hasta el 2 de julio, mientras se reorganizan los espacios con medidas de protección más eficaces.
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«El problema de los visitantes que vienen a los museos solo para hacerse selfis o crear memes es ya una plaga», ha declarado con indignación Simone Verde, que acompañaba al ministro de Cultura Alessandro Giuli en una visita institucional a Montelupo Fiorentino cuando fue informado del suceso. «Pondremos límites muy precisos. Impediremos comportamientos incompatibles con el sentido de nuestras instituciones y con el respeto debido al patrimonio cultural», añadió el director Verde.
El turista fue identificado en pocos minutos gracias a las cámaras de seguridad. Según la reconstrucción de los hechos, una pareja intentaba recrear la escena del retrato para un contenido digital. Pero el joven perdió el equilibrio y cayó de espaldas contra la pintura, cuando la novia pretendía hacerle una foto. Tras el impacto, fingió observar el cuadro como si nada hubiera ocurrido, pero el personal de vigilancia actuó de inmediato.
El turista ha sido denunciado ante el Núcleo Tutela Patrimonio Cultural de los carabinieri y podría enfrentarse a una grave sanción. El sindicato Cisl de los Uffizi ha recordado que ya se había advertido a la dirección sobre el riesgo de accidentes por las pedanas de distanciamiento: «Son demasiado bajas y oscuras. Quien mira una obra no está pendiente del suelo. Hace falta instalar barreras de acero, tal vez menos estéticas, pero mucho más seguras», declaró Silvia Barlacchi, representante sindical del museo.
No es el primer caso de daño al patrimonio cultural que sucede en Florencia en los últimos tiempos. En septiembre de 2023, un turista alemán se subió a la fuente de Neptuno en Piazza della Signoria para un selfie y dañó parte del monumento. Y pocos meses después, otros dos visitantes dejaron pintadas en el histórico Corridoio Vasariano.
El accidente de este fin de semana se produce, además, en un día simbólico para los Uffizi: por fin ha sido retirada la grúa que durante casi dos décadas afeaba la fachada del museo desde el Piazzale degli Uffizi. Colocada durante las obras de ampliación, era considerada por muchos florentinos una herida abierta en el perfil urbano del centro histórico. «Hoy es un momento importante no solo para Florencia, sino para toda Italia», celebró el presidente de la región Toscana, Eugenio Giani.
El ministro Giuli lo dijo con ironía: «Viva la clase trabajadora que ha devuelto a los florentinos una vista paradisiaca. Esta es una victoria para todos los que creen que la belleza es parte esencial de la vida». Quizás por eso, en contraste con esa recuperación del paisaje urbano, el impacto contra el cuadro de Gabbiani ha causado aún más consternación. Porque si la belleza puede ser restaurada, el respeto perdido cuesta mucho más recuperarlo.
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