Descubren evidencias que podrían vincular al mago Merlín con un pueblo escocés

El 'Vita Merlini Sylvestris' (La vida de Merlín del bosque), un manuscrito medieval que se conserva en la Biblioteca Británica, describe cómo Merlín habría sido encarcelado en Drumelzier en el siglo VII y finalmente enterrado a orillas del río. Durante mucho tiempo, esta historia fue considerada como una mezcla de mito y superstición. Sin embargo, recientes hallazgos arqueológicos sugieren que podría haber algo de verdad en esta antigua leyenda.

En 2022, un grupo de voluntarios de toda Escocia, liderado por Guard Archaeology, una empresa privada que combina la investigación académica con la arqueología comercial, inició una exhaustiva investigación en la zona. El objetivo era indagar en las raíces históricas de la leyenda de Merlín y determinar si los relatos transmitidos a lo largo de los siglos podrían tener alguna base real. Los resultados de este estudio, que han sido publicados recientemente, han revelado hallazgos sorprendentes que podrían cambiar nuestra comprensión de la historia de Merlín.

Uno de los descubrimientos más intrigantes provino de un estudio geofísico que identificó una característica arqueológica similar a una tumba cerca del lugar conocido como 'La tumba de Merlín' en Drumelzier. Este hallazgo ha reavivado las especulaciones sobre la posibilidad de que los restos de Merlín puedan realmente yacer en estas tierras escocesas.

Además, las excavaciones en el fuerte de Tinnis, una prominente colina que domina el área donde se supone que está enterrado el mago, han revelado que esta fortificación estuvo ocupada durante el final del siglo VI y principios del siglo VII. Este período coincide con la época en que se sitúa la historia de Merlín, según el 'Vita Merlini Sylvestris'. Los arqueólogos han señalado que el fuerte de Tinnis presenta todas las características de una fortaleza de gran importancia en esa época, lo que refuerza la idea de que la leyenda pudo haber surgido de hechos reales.

Ronan Toolis, director ejecutivo de Guard Archaeology, explicó que «la leyenda de Drumelzier contiene costumbres precristianas, nombres antiguos en cúmbrico (una lengua celta que se hablaba en las regiones del noroeste de Inglaterra y el sur de Escocia durante la Edad Media) y está asociada con sitios locales que, según la arqueología, podrían haber dado origen a la historia».

«Es una coincidencia notable que este fuerte, a diferencia de la mayoría de los asentamientos de la Edad del Hierro en la zona, esté datado exactamente en el mismo período en el que se sitúa la leyenda de Merlín. Esto sugiere que la historia probablemente se originó en Drumelzier, en lugar de haber sido traída por algún cuentacuentos medieval errante», explicó.

Toolis enfatizó que los nuevos descubrimientos no prueban que la leyenda sea cierta, pero demuestran que es muy probable que haya surgido en este lugar. «Es posible que la historia comenzara como una historia popular, que con el tiempo fue embellecida y modificada hasta cambiar casi por completo su forma original», agregó.

A diferencia de la representación clásica de Merlín como el sabio y poderoso consejero del rey Arturo, la leyenda local de Drumelzier pinta un cuadro mucho más sombrío. En lugar de un mago venerado, Merlín aparece como una figura trágica, un hombre atormentado y confuso, propenso a recitar acertijos enigmáticos y profecías incomprensibles. Según la leyenda, fue mantenido prisionero por un tirano en un reino olvidado, y finalmente murió tras ser arrojado al río por unos pastores, quienes lo mataron al considerarlo una amenaza debido a su comportamiento errático y misterioso. Otra versión menciona que murió después de ser perseguido, lo que lo llevó a caer en el río y ahogarse.

Además del fuerte de Tinnis, los arqueólogos también realizaron excavaciones en los túmulos de Thirlestane, unos montículos de tierra o piedra que se utilizaron en la antigüedad para marcar tumbas ubicados al otro lado del río Tweed. Allí, descubrieron un túmulo cuadrado que data de finales del siglo III a finales del siglo VI d.C., que probablemente marcaba las tumbas de dos individuos de alto estatus. Este descubrimiento también sugiere que la zona de Drumelzier estuvo habitada por personas de notable importancia durante siglos antes y después del período en que se sitúa la leyenda de Merlín.

Otro hallazgo fue el de fragmentos de hojas de sílex, una variedad de cuarzo, en la cima del fuerte de Tinnis, que datan del Mesolítico Tardío o Neolítico Temprano. Estos fragmentos ofrecen una pista sobre la presencia humana en la zona mucho antes de la época de Merlín, lo que sugiere que el área ha sido un lugar significativo para la actividad humana durante milenios.

Toolis reflexionó sobre la conexión entre la arqueología y el folclore, señalando que los monumentos del pasado, como los túmulos de Thirlestane, habrían tenido un significado especial en el paisaje, influyendo así en las historias y leyendas que se transmitieron de generación en generación. «Los habitantes antiguos de Tweeddale eran, sin duda, conscientes de la historia que se encontraba bajo sus pies», dijo Toolis. «Y a través de relatos locales, preservaron la memoria de aquellos que les precedieron».

El vínculo entre la leyenda y la historia siempre ha sido difuso, y la figura de Merlín no es una excepción. ¿Podría haber sido un hombre real, un líder espiritual o un sabio que vivió y murió en estas tierras escocesas? ¿O fue simplemente una creación de la imaginación popular, alimentada por las antiguas costumbres y creencias de la región? Aunque los nuevos descubrimientos no prueban de manera concluyente que Merlín existiera, sí sugieren que detrás del mito podría haber una figura real que, con el tiempo, fue transformada en una de las más emblemáticas de la mitología británica.