'Esta será mi venganza', de William González: geografía sentimental de una tragedia

Ahora que cierra su tetralogía con 'Esta será mi venganza' se puede apreciar hasta qué punto esos cuatro libros son un único poema: hay en ellos una mirada hacia una Nicaragua tan fantasmal como real, hacia los callejones sin salida de un país al que no se le adivina el futuro, pero cuyo presente está lleno para él de muertes, de desapariciones, de paisajes inolvidables y de seres memorables.

POESÍA

'Esta será mi venganza'

• Autor William González
• Editorial Hiperión
• Año 2024
• Páginas 84
• Precio 12,95 euros

William González nos describe por ello el mapa de una tragedia que no ha dejado nunca de agrandarse. Sus libros, por eso, nos cuentan la historia de una precariedad política, social y, sobre todo, sentimental. Una precariedad que le lleva a detenerse en esos círculos terribles de la inmigración: los trabajos infames, la ciudadanía de segunda, el sentirse señalado por los otros, la desubicación y el dolor. Pero que a la vez le sirve para alzar una mirada compasiva hacia los puntos cardinales de su amor, su madre sobre todo, un padre y un abuelo lejanos, los amigos y una mujer que se marchó.

Con un voz siempre pobre, donde se busca el brillo de lo mate, aquella « palabra mía sin aroma», que diría José Hierro, con unos poemas a ras siempre de la experiencia común, con un registro realista y prosaico, no ajeno a la sencillez expresiva y a la narratividad, William González lo apuesta todo a hacer de la palabra un testimonio y una denuncia.

Sus riesgos más que poéticos son riesgos vitales, donde el contenido construye una estética figurativa y social. Se persigue la eficacia expresiva aunque se rebaje el vuelo del poema porque solo en ese punto lo real puede ser apreciado en toda su dimensión.

'Los nadies', 'Me duele respirar', 'Inmigrantes de segunda' y 'Esta será mi venganza' cierran, según el autor, un ciclo en su obra poética. Una obra poética de ritmo vertiginoso en su escritura y su publicación, máxime cuando se trata de un poeta todavía demasiado joven, pero que conecta con lo que están haciendo otros escritores de origen hispanoamericano, es decir, dar voz a la experiencia de la inmigración, a esa geografía de desubicaciones emocionales. Ojalá, como en este caso, se haga con discursos poéticos novedosos, con libros que queden en nuestra memoria porque supieron expresar toda la complejidad de nuestro tiempo.