CRítica DE:
'Nada más ilusorio', de Marta Pérez-Carbonell: contar historias que son vidas
Narrativa
La madurez narrativa de la escritora y docente, insólita en una ópera prima, es lo profundo de las reflexiones propias y ajenas
Otras críticas del autor

La protagonista de esta excelente novela termina siendo la literatura misma, centro de toda ella. Marta Pérez-Carbonell ha creado un artificio metaliterario muy particular, pues el lector entra en él y no sale hasta terminar la novela (es de las que terminas leyendo ... de un tirón casi sin darte cuenta).
La novela reproduce esa condición aparentemente inocente de hablar y hablar sobre las vidas, de oír contar las de los otros, hasta terminar metiéndote en ellas, compartiendo el destino de unos personajes en el que la narradora protagonista acaba involucrada, viviendo la ficción como si se tratase de algo real con consecuencias.
NOVELA
'Nada más ilusorio'

- Autora Marta Pérez-Carbonell
- Editorial Lumen
- Año 2024
- Páginas 204 páginas
- Precio 19,90 euros
La autora presta algunos de sus rasgos autobiográficos (formación en Londres, etapas de vida en Estados Unidos), pero no pasa de ahí. Su carácter de estudiosa de ficciones, toma la delantera de la trama desde un carácter reflexivo sobre lo que nos acontece cuando nos metemos en las historias una vez oímos hablar de ellas y también cuando las leemos. Lo ilusorio es que nos terminen concerniendo. Hay una frase de Ricardo Piglia, reproducida casi al final que ofrece la clave, no solo del título, sino de la semántica de la novela: «No hay, a la vez, nada más real ni nada más ilusorio que el acto de leer». Y añade los nombres de Javier Marías (sobre el que la autora ha escrito), de Kundera, de Didion para reforzar esa magia creadora de mundos que la palabra convoca, historias que poseen realidad radical, hasta llegar incluso a modificar destinos.
La literatura nunca dejara de acompañarnos precisamente por esa ilusión nada vana de hacer que las letras alcancen incluso a matar a alguien. Lo que algunos teóricos llamaron cualidad 'performativa' de la ficción, y que desde Cervantes nos acompaña.
Pocas veces he visto contada de manera mejor lo que fue la difícil vida durante la reciente pandemia
Pero tal cosa no sucede sin peligros y consecuencias. La trama de la obra gira casi toda en torno a una novela titulada 'Rocco', que un profesor universitario llamado Terence Milton publica causando un escándalo denunciado por un crítico en un artículo del 'New Yorker', pues lo reproducido en ella, la relación amorosa de un profesor, que tiene todos los rasgos del autor, con un muchacho cuarenta años más joven que él, y que ha originado su desaparición y no se sabe si su muerte, cuando la novela ha salido a la luz.
Por mucho que el autor defienda que Rocco no es Hans, queda la pregunta abierta sobre la legitimidad de trasladar al papel las vidas de otros, y cuánto daño puede ocasionar hacerlo. De la cuestión se entera el lector en las primeras páginas de 'Nada más ilusorio', pero de los matices, lo que hay detrás de verdades y mentiras, nos iremos enterando a través de un noche de contarse las vidas en un viaje nocturno en tren desde Londres a Edimburgo, que pasan dialogando Terence Milton, un joven profesor discípulo suyo que le acompaña (cuya presencia en la novela podía haberse justificado mejor) y la narradora, que a su vez va introduciendo su propia historia de fracasos en forma de 'flashbacks'.
La narración tiene algo de mágico, pues la vida que te cuentan atrapa, por leve que sea la anécdota, y atrapados por ese mundo y esa magia pasamos los lectores horas estupendas. La cualidad sobresaliente de la madurez narrativa de Marta Pérez-Carbonell, insólita en una ópera prima, es que lo profundo de las reflexiones sobre lo que hacemos o esperamos de otros se desliza como quien no quiere la cosa, de manera que emerge natural, como únicamente saben hacer los buenos contadores.
Por ejemplo, pocas veces he visto contada de manera mejor lo que fue la difícil vida durante la reciente pandemia o el extrañamiento que las personas padecen en culturas y paisajes ajenos. Y un último rasgo no menor: qué bien viene a la novela su cosmopolitismo, que hace cercano lo universal. Hay que estar atentos a esta nueva voz de nuestras letras.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete