'Los hombres de mi vida', de Piedad Bonnett: esperar a los muertos

Con una voz personal muy reconocible ha logrado construir además un estilo de poesía extremadamente tensionada, pero extremadamente eficaz a la hora de plasmar la realidad emocional.

POESÍA

'Los hombres de mi vida'

• Autora Piedad Bonnett
• Editorial Visor
• Año 2024
• Páginas 52
• Precio 12 euros

En 'Los hombres de mi vida' nos habla una vez más de una intimidad fracturada, de una tragedia íntima y de una conciencia que ha hecho del duelo una forma de relacionarse con el tiempo y con el mundo, pero también de los caminos de la reconstrucción personal, de la voluntad de la resistencia y de la aceptación de todo aquello que fue pasado.

Es un libro de diálogos, de conversaciones en voz baja, íntimas y perturbadoras con su padre, su marido y su hijo, esos hombres que han formado parte de su vida. Hay memoria y pérdida, pero sobre todo una manera de visión en el poema que convierten el presente en un vasto territorio de incertidumbre, como si la incertidumbre se convirtiera en el principio que rige lo cotidiano, el interior de la familia y de los restos que de ella quedan.

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En la serie 'Domingos' el festín de la comida deriva en una congestión emocional, en un bullir de ausencias, ese sentimiento de ausencia que atraviesa todo el libro como si fuera un enorme animal marino o como un moscardón que zumba. En 'Vidas de películas' se dice: «La vida debe estar en otra parte// en renacer de mí cada mañana» y en 'Cuarto de hotel' se habla de ser como «un águila que pliega sus alas y su cuello,/ la más dichosa reina destronada»; pero es en 'A Bigger Splash' donde se da de forma magistral uno de los grandes temas del libro, la espera, la espera tal vez imposible, pero la espera de que tal vez de las aguas de una piscina se produzca la vuelta de su hijo muerto: «Y me he quedado/ aquí, en mi silla blanca, / esperando que emerjas de las aguas».

Libro breve, pero de una escritura deslumbrante, de una profundidad trágica y de una sabiduría existencial capaz de indagar en el dolor, en la ausencia y en lo perdido y también en la posibilidad de reconstruirse de nuevo, 'Los hombres de mi vida' da la talla de la grandeza de esta poesía. Un puñado de poemas que verdaderamente tienen esa dimensión estremecedora y perturbadora de la poesía de Piedad Bonnett, pero también esa dimensión de búsqueda del consuelo y de búsqueda de eso que hay entre «el miedo y la luz».

Piedad Bonnett pertenece a una generación de poetas en español que han tenido que escribir inmediatamente después de los grandes maestros, después de Borges, de Lezama, de Octavio Paz, y que sin perder de vista el hecho de hacer una gran poesía han abierto la palabra a la vida, a la biografía personal, con sus fantasmas y sus paradojas. En este sentido, Piedad Bonnett es de las más importantes, de las más emocionantes y verdaderas, como queda demostrado en 'Los hombres de mi vida'.