'Happy' en Centro Arte Complutense: Los cuentos sin moraleja de Jorge Pineda

La estructura expositiva presenta distintos capítulos de índole temática o técnica, y se evita cualquier orden cronológico. Se trata de marcar distancias respecto a una historiografía eurocéntrica anclada en perspectivas unilaterales de progreso; también, evoca el propio discurso del artista, quien reflexionó críticamente sobre el peso de las grandes narrativas, hegemónicas y excluyentes, que impone globalmente el sistema del arte occidental.

A esta última exploración responden obras como 'Guggenheim's Trap' (2016), 'Redacted Gold' (2022) o la instalación interactiva 'Lección de anatomía: homenaje a J. Beuys' (2013). En ellas, Pineda emplea el color dorado como señuelo para la mirada, al tiempo que demuestra el amplio desarrollo de su sensibilidad humorística.

Su ácida concepción de lo cómico también alcanza ámbitos más peliagudos, pero siempre como estrategia para hacerlos emocionalmente más tolerables. Nacido el mismo año en que falleció el dictador Trujillo, Pineda vivió en primera persona el conflicto social de la negritud en el desarrollo de la modernidad dominicana.

En la instalación fotográfica 'Colmenares' (1999-2022), utiliza su propio rostro como punto de partida para embarcarse en un juego lúdico, en ocasiones hilarante, de desplazamientos identitarios relacionados con la raza, el género y la clase. Su poética también aborda de manera recurrente las infancias marcadas por el castigo, el borrado, la vergüenza y la ocultación. En esta línea, resultan conmovedoras sus esculturas de niños sin cabeza, cuyo peinado afro se confunde con la negrura garabateada en la pared.

Artista multidisciplinar, Pineda siempre otorgó un carácter central al dibujo, protagonista de sus primeros carteles con los que se ganaba la vida. La expresividad de la línea también modula su extensa producción gráfica, donde destaca su destreza en el empleo de la gubia sobre planchas xilográficas.

La fuerza de su trazo culmina en unos extraordinarios trabajos a bolígrafo realizados en las primeras décadas de los dos mil: en ellos, el virtuosismo técnico se pone al servicio de la creación de fascinantes imaginarios simbólicos, encarnados en unas infancias inmersas en acciones perturbadoras.

Las alusiones a Caperucita Roja, al bosque encantado y otros emblemas de la literatura infantil son recurrentes, pues comprendió la potencia del cuento como herramienta simbólica para interpretar el mundo. Pero sus narraciones siempre aparecen desnudadas de moraleja: queda a juicio del espectador extraer la que cada uno crea conveniente.

Jorge Pineda

'Happy: Ensayos sobre la obra de Jorge Pineda'. C Arte C. Centro Arte Complutense. Madrid. Avda. Juan de Herrera, 2. Comisarios: Centro León y Javier Martín-Jiménez. Hasta el 7 de abril. Cuatro estrellas

Esta ambigüedad, que ha provocado lecturas tergiversadas de algunas de sus imágenes, también le permitió mantener su discurso en un ámbito cuestionador e inquietante. Uno de sus grandes legados es, precisamente, su capacidad para generar imágenes semánticamente complejas a través de herramientas humildes e iconografías populares.