'Guernica despedazado', de Julio Anaya: dividir el 'Guernica' para amplificarlo

Esto llega al paroxismo en este 'Guernica', realizado en 2023 y cedido por la Fundación Mecenas Casa Natal Picasso, institución privada que en los últimos años está convirtiéndose en importante agente dinamizador en Málaga.

Lo que permite ese grado de transformación, relectura, reinterpretación y amplificación de algunas cuestiones cruciales de la obra 'picassiana' se debe no sólo al material, a esos 18 cartones que Anaya encuentra, pinta y ensambla hasta reproducir el referente con sus medidas, sino al modo de ser expuesto.

Esto es, a su despedazamiento en distintos conjuntos que, en algunos casos, entran en diálogo con piezas de Picasso con paralelismos iconográficos y de fechas próximas a 'Guernica' (1937), como las estampas 'Sueño y mentira de Franco' (7 y 8 de enero de 1937), y algunos de los grabados para 'La obra maestra desconocida' y 'Las metamorfosis' (ambas de 1931); aguafuertes de Manolo Garvayo sobre la trágica 'desbandá', aca- ecida en Málaga el 7 de febrero de 1937; así como otras obras 'picassianas' igualmente recreadas por Anaya.

Se ha usado 'despedazado' para titular la exposición, dada la fidelidad de esta imagen para con el resultado, fruto de la brillante idea de fragmentar la obra de Anaya, que debemos a José María Luna, anterior director de la Agencia Pública que gestiona la Casa Natal de Picasso, el Museo Ruso y el Centre Pompidou Málaga; Luna tuvo el acierto de incorporar a Anaya desde 2020, cuando aún no gozaba de la trascendencia y reconocimiento actuales, en distintos proyectos del Museo Ruso. Sin duda, se podrían enunciar otros términos, igualmente pertinentes, en función a esa división.

'Desmembrado' sería uno de ellos, con lo que se incidiría tanto en su dispersión como en la tragedia y –si me permiten– en la carnicería humana del bombardeo. De hecho, apreciamos cuerpos desmembrados, como el del personaje que se sitúa en la zona baja, reducido a su cabeza decapitada y al brazo amputado, que ya apareció en 'Estudio con cabeza de yeso' (1925). 'Desgarrado' sería otro, puesto que la superficie del 'Guernica' de Anaya, por mor de esa unión de cartones, aparece en algunas zonas abierta, literalmente desgarrada. Ello refuerza el dramatismo, como si la obra se quejara, se doliese o gritase, como la yegua, la madre que porta a su hijo muerto o el personaje que asoma entre llamas: todos claman con sus bocas abiertas.

Precisamente, y en relación a los cartones, también podríamos hablar de 'reventado', término con eco trágico. Para esta opción recuperamos la imagen que Juan A. Ramírez alumbrara en relación a las guitarras cubistas de cartón –«guitarras reventadas», diría– que Picasso realizó en 1912.

Julio Anaya

Julio Anaya. 'Guernica despedazado'. Museo Casa Natal Picasso. Málaga. Plaza de la Merced, 13. Comisario: Carlos Ferrer Barrera. Hasta el 28 de septiembre. Cuatro estrellas.

Y, por último –cómo no–, 'fragmentado', que permite un acercamiento a motivos representados y a los sentidos arqueológico y de la permanencia que poseía Picasso, reforzado aquí por los puntuales diálogos con otras obras, de modo que en 'Guernica' vendrían a confluir iconografías desarrolladas con anterioridad que recupera e intrinca. Anaya pinta y divide 'Guernica' para, así, amplificarlo.