LIBROS
Cristina Fernández Cubas vuelve con 'El columpio': una obra maestra
Narrativa
Esta novela corta concentra lo mejor del mundo y del estilo de la narradora española que más se parece a Henry James. Crítica de José María Pozuelo Yvancos
Otras críticas del autor
Cristina Fernández Cubas es maestra en el cuento
Cristina Fernández Cubas publica poco, pasa años de silencio entre sus obras y no le conozco, sobre todo cuando ejecuta cuentos o novela corta, ninguna baladí o desmayada. Es la narradora española que más se parece a Henry James. Espacios reducidos, agobiantes, personajes que ... esconden secretos que el lector únicamente atisba. En 1993 apareció por vez primera 'El columpio' y tengo por seguro que de ser inglesa o norteamericana quien la firma constituiría un hito universalmente reconocido. Esta novela corta está a la altura de 'Otra vuelta de tuerca'.
Por tal cosa celebro que haya decidido volver a publicarla, ya que concentra en realidad lo mejor de su mundo y estilo. Su mundo desarrolla una forma sutil de la categoría modal de lo fantástico, al insertar en espacios reducidos, casi siempre familiares, alguna forma de distorsión que hace aparecer lo ominoso freudiano.
NOVELA
'El columpio'
- Autora Cristina Fernández Cubas
- Editorial Firmamento
- Año 2023
- Páginas 112
- Precio 21 euros
La perturbación anida donde creemos que todo es de una forma, pero termina siendo de otra. Para hacerlo esta novela tiene un portentoso estilo narrativo de enigma por resolver. Un enigma que reside en el pasado, en las relaciones de la madre de la protagonista con sus hermanos y un sobrino. Casona rural con Torre, en una finca familiar cercana al Pirineo, en la que el tiempo se ha detenido y a la que, después de haber muerto su madre, viene Lucila, quien tras vivir en Francia sin conocer a la familia materna, quiere hacerlo.
En este encuentro nada es normal, no lo es la atmósfera de misterio, tampoco que las cartas enviadas a los tres habitantes de la casona, tanto por la madre como al de ella avisando de su llegada, no hayan sido abiertas. Un pasado oscuro y misterioso se cierne sobre las relaciones de Eloísa, la madre, en el que tienen función metonímica el juego del diábolo y el columpio del jardín. Lucila lo va a ir descubriendo poco a poco, a través de fenómenos de extrañamiento, en que las rutinas de los tres extraños familiares en apariencia inocentes y anacrónicamente banales, van cercándola en una red cuyo sentido no alcanza a conocer. No me perdonaría el lector que revelase más.
La perturbación anida donde creemos que todo es de una forma, pero termina siendo de otra
En el estilo de Cristina Fernández Cubas es fundamental la posición del lector, al que respeta tanto que le deja tejer sus hilos hermenéuticos. Nada hay peor cuando se trata de la categoría de lo fantástico que explicarlo. Es el lector el que supone, conjetura, se sorprende o teme. Acompaña a Lucila en cada descubrimiento de los estrafalarios comportamientos de los tres parientes, de tal forma que la acción está surgiendo en ese momento que la lees. Ni la protagonista tiene la verdad de lo que ocurre ni su búsqueda logra alcanzar un final racionalmente explicable. Cristina Fernández Cubas es hija de la modernidad del Romanticismo europeo proyectada sobre lo que conocemos como 'Modernism'.
Ella y la que me parece su mejor discípula, Pilar Adón, asientan su narrativa en lindes donde los sueños, las pesadillas o la zozobra amenazan a criaturas indefensas como sus mujeres jóvenes asomadas al abismo de atávicas posesiones que no alcanzan a comprender. También la racionalidad es un cerco que la gran literatura está llamada a romper. Para decir que las pesadillas nos pertenecen, acompañan y fijan ese otro lado de nuestra existencia.