LIBROS

El siglo de Darío, Rubén

Un viaje deslumbrante por una vida errante, pero cuajada de hallazgos literarios que transformaron el verbo y la palabra

Rubén Darío (Metapa, Nicaragua, 1867-León. 1916)

07/01/2022
Actualizado 10/01/2022 a las 11:03h.

En América -en nuestra América, como gustaba decir Martí desde 1891- lo moderno es el símbolo de los valores nuevos y el precursor del porvenir. Luis Sáinz de Medrano lo denominó, «La vanguardia desde el modernismo» . Un empuje modernista que buscará impulsar, al ... tiempo, sus tradiciones propias, pero que se verá encadenado a las tempestades contemporáneas. El hecho de que nada es definitivamente dado, que no pueda ser considerado como un horizonte cerrado, como ‘natura disseccata’, comporta una modificación radical de la mirada sobre el mundo.

Lo que vemos es una proposición, una posibilidad, un expediente. Lo otro, en principio, es invisible. De ahí, el paso de la lengua a la metáfora, al código, al gesto. Se preguntaba Ángel Rama, respecto a Rubén Darío (18767-1916): «¿Por qué, abolida su estética, arrumbado su léxico precioso, superados sus temas y aun desdeñada su poética, sigue cantando empecinadamente con voz plena ?». Algo que Vicente Aleixandre respondería: «Rubén callado que al mirar descubres.».

‘Rubén Darío. La vida errante’. Rocío Oviedo Pérez de Tudela y Juliio Vélez-Sainz. Cátedra, 2021. 573 páginnas. 25 euros

Espacio transatlántico

Hacia finales de los años ochenta del siglo pasado, y para conmemorar los cien años de 'Azul', entrevisté a Octavio Paz para 'Revista de Occidente', y el Nobel fue categórico: «La modernidad poética en español no comienza con Bécquer, como a veces pensó Juan Ramón Jiménez. No. Comienza con Rubén Darío.» La biografía escrita por Rocío Oviedo Pérez de Tudela y Julio Vélez-Sainz, ‘Rubén Darío. La vida errante’, hace honor a estas palabras de Paz. Darío inventó la literatura contemporánea en español , incluso en su vertiente prosística. Más allá de las fronteras española y americana, creó el espacio transatlántico (que tanto gusta de repetir Julio Ortega ). Resulta difícil encontrar a un americano tan fuertemente atraído por Europa -tal vez, sólo T.S. Eliot para el inglés- y a la vez tan profundamente americano. Ésta es una biografía, como la de Ellman sobre Joyce, Todd sobre Camus, que compone u na sinfonía de concordancias entre la obra literaria y la vida.

Cada capítulo es una vuelta de tuerca más hacia el infinito. Con una documentación exhaustiva; con una análisis preciso y conciso del contexto social, personal, literario, político de cada nueva obra; con una búsqueda incesante de marcar los hilos invisibles de las amistades, las enemistades, las penurias y las alegrías, las luces y las sombras (que también aparecen aquí); con los diversos perfiles de alguien que fue poeta, diplomático, periodista, dandy, ‘bon vivant’ y ‘clerici vaganti’, han logrado algo nada fácil de contar en una arrebatada vida llevada por la pasión, ahí las páginas dedicadas a sus matrimonios, su amor por Francisca, todo ello configura algo complejo de resolver: la biografía de una de las figuras claves del siglo XX en la literatura en español.