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ABC Cultural

Miguel Pradilla, el pintor de las mil caras que no quiso ser como Picasso

El artista diseñó para Francia el primer coche descapotable pero nunca pudo escapar del yugo de Francisco Pradilla, el gran pintor histórico del siglo XIX

Lucía M. Cabanelas

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Pintó más de 4.000 cuadros pero no renunció a su pasión por el motor, y trajo a España el primer coche de carreras extranjero. Fue un laureado deportista y creó su propio equipo de ciclismo, pero nunca consiguió que se le conociese por sus ... propios méritos. Para el resto del mundo, siempre fue el hijo de Francisco Pradilla, el gran pintor del siglo XIX, conocido por representar en sus lienzos episodios históricos nacionales como «La rendición de Granada» —que ahora cuelga en el Palacio del Senado— o a personajes míticos como «Doña Juana la Loca» . Ni siquiera los colores vivos con los que renovaba el arte de su progenitor, maestro y bestia negra al mismo tiempo, sirvieron para que su nombre evitase los derroteros del olvido. Tampoco que su estilo rompiese con las vanguardias de sus coetáneos, y que nunca, como hicieron tantos otros, intentase seguir los pasos de afamados artistas contemporáneos como Picasso. Y para luchar contra esta desmemoria impuesta por la rebeldía de Miguel Pradilla , su nieta, poco después del cincuenta aniversario de su muerte, reivindica su obra.

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