Karl Marx, el hombre detrás del mito

Su padre se empeñó en que estudiara Derecho, disciplina que nunca interesó al joven Marx, que cosechó malas notas en la Universidad de Bonn . Obligado a matricularse entonces en la más formal Universidad de Berlín, acabó interesándose definitivamente por la filosofía y la historia.

Johanna Bertha Julie von Westphalen, llamada Jenny , se convirtió en su esposa en 1843 después de diez años de noviazgo. Se conocían desde niños y ella era cuatro años mayor que él. Baronesa de la clase dirigente prusiana , escritora y politóloga, fue interlocutora intelectual esencial para su marido.

El matrimonio tuvo siete hijos, cuatro de los cuales murieron siendo niños , lo que provocó un profundo pesar en el filósofo.

Su hija Eleanor «Tussy» fue una activista que luchó por mantener viva la llama del marxismo. Se suicidó con ácido prúsico al descubrir que su pareja, el biólogo Edward Aveling, se había casado en secreto con una actriz. Otra de las hijas de Marx, Jenny Laura, se suicidó del mismo modo junto a su esposo, el periodista y revolucionario francoespañol Paul Lafargue.

Tuvo un hijo ilegítimo con Helene Demuth, una criada que les ayudaba en las tareas domésticas y con la que mantenían una relación familiar. Al parecer Friedrich Engels, amigo íntimo y colaborador de Marx, confirmó este hecho antes de su muerte, aunque hay historiadores que lo ponen en entredicho.

Tras el fallecimiento de su esposa en 1881, la salud de Marx sufrió un quebranto. Enfermo de bronquitis y pleuresía, su final llegó el 14 de marzo de 1883 en Londres . Murió como un apátrida. Fue enterrado en el cementerio de Highgate. Apenas una decena de personas acudió al sepelio. En la lápida está grabada la frase «¡Proletarios de todos los países, uníos!».