El Rey Midas de la basura vital

La asquerosidad orgánica e inorgánica que recubre las tiras de Hanselmann combina bien con la tristeza alienada de unos personajes ‘drogotas’ que ni intentan escapar del agujero negro de su existencia. Pero que se divierten, se quieren, se hacen daño. Macarrismo y ruina vital, el autor australiano utiliza estas historias para hacer terapia, se descarga dibujando. Dice, como si fuera el Rey Midas de las heces, tratar de «convertir la mierda en oro», hay una intimidad en este vertedero anímico. De la que quizá pueda dar fe la Reina Letizia , que en una Feria del Libro se llevó un cómic de este rey del ‘underground’. Una Reina muy inquieta, fan de Lars Von Trier y su ‘ Anticristo ’, como nos contaron de primera mano.

Hanselmann nació en las antípodas de Doña Letizia, en Tasmania , como el demonio, en un municipio de alta criminalidad. Su madre era adicta a la heroína y su padre, motero. Entre ayudas sociales y hurtos, la matriarca sacó adelante al hijo, que en la adolescencia empezó a ser tratado por ansiedad y depresión. También comenzó a tope con el alcohol y las drogas. Y su travestismo, algo poco valorado en Lauceston . La liberación de este hombre travesti y heterosexual fue ardua. Su terapia ha sido traducida a 13 idiomas.