A la búsqueda del 'tesoro dorado' en los primeros compases del salón

Comenzamos nuestro tempranero recorrido en el Pabellón 7 . Uno de los primeros lugares que visitamos es la galería Helga de Alvear . Su responsable artístico, Pedro Marín, explica que este año la feria está más activa, algo en lo que repara porque muchos coleccionistas les están pidiendo información. Además, el aniversario de la cita es un motivo de celebración que anima a que los visitantes acudan durante estos días a la Semana del Arte . «Las galerías somos el primer eslabón para que los museos compren obras. Parece que el relato de los historiadores quiere olvidarnos. Luchamos porque la relación feria, galería y museo siga vigente y unida», admitía Marín, poco antes de que irrumpiera, paradojicamente, en su estand Manuel Borja-Villel , director del Museo Reina Sofía desde 2008.

Respecto a los precios en Helga, el galerista admite: «No somos demasiado caros». La obra aquí con más ceros en su precio, ' Oro y piojo I ', es del artista madrileño Jorge Galindo . Un óleo sobre lienzo por 60.000 euros. También destacan dos impresiones sobre papel fotográfico del escultor y fotógrafo alemán Thomas Demand por 40.000 euros cada una, un autor que recientemente expuso en la galería. Por otro lado, lo más económico por parte de la firma alemana son unas obras gráficas del Premio Nacional de Artes Plásticas 2010 Santiago Sierra por unos 500 euros, un creador que en otras ediciones dio más de un quebradero de cabeza a este espacio. «Es el primer paso para que la gente con menor nivel adquisitivo empiece a relacionarse con artistas y galeristas y fomentar así el coleccionismo joven. Se puede tener una obra de Sierra en casa sin ser millonario», explica Pedro Marín.

Damián Casado ( Casado Santapau ) cuenta que ARCO siempre ha funcionado muy bien: «El mercado no ha empeorado, todo lo contrario». Respecto al precio medio de sus obras, estas rondan los 30.000 euros, desde varios dibujos de creadores latinoamericanos por 5.000 hasta una pintura del año 2007 del creador cubano Enrique Martínez Celaya (1964) por 160.000.

«Siempre soy optimista ante el inicio de este tipo de ferias», afirma Elba Benítez desde su espacio. La madrileña explica que muchos coleccionistas privados y grupos de museos han confirmado su presencia. «El mercado nacional, después de haber estado contenido por los problemas sanitarios, puede volver a darnos un empuje económico importante», apunta.

Benítez admite que tiene obras por valor de 5.500 euros con un gran creador a sus espaldas, como es el caso de las fotografías de la serie 'Cannabis', del danés Joachim Koester . Las piezas más relevantes en lo económico son 'Satellites', del libanés Marwan Rechmaoui (50.000 euros) y 'Conversation Piece' (70.000), del portugués Carlos Bunga, que expondrá desde el 8 de abril en el Palacio de Cristal del Museo Reina Sofía.

En el estand 7B15 visitamos Marlborough . La firma internacional cumple su 30º aniversario y ha querido homenajear a los artistas que le han acompañado desde su fundación en 1992 en la capital española. Desde la escuela londinense, ‘ Chica con un feto ’ es el ilustrativo título de la obra de la portuguesa Paula Rego (1935), con un precio que asciende a los 800.000 euros por este pastel sobre papel del año 2005. En el caso de la escultora Blanca Muñoz , protagonista ahora de la nueva Plaza de España en Madrid, su pieza se puede adquirir por un precio menos elevado: son los 30.000 euros de ‘Romboidal’, del año 2021.

El peculiar filandés Riiko Sakkinen , con su firma Forsblom , presenta una imagen con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con un rótulo debajo: «Mis líderes favoritos de extrema izquierda». La obra está valorada en 16.000 euros. El artista también presenta un dibujo del rey Don Juan Carlos acompañado por el lema «En rebajas, era un rey pero ahora solo un fugitivo», a un económico precio de 2.200 euros. Es habitual este tipo de guiños por parte del artista, que ya acostumbra a traer a la feria creaciones polémicas de carácter político como el ‘Franco no era tan malo como dicen ’ de 2020.

En el ala más norte del séptimo pabellón encontramos la joya de la corona (por el momento). Leandro Navarro trae la obra más cara: un cuadro de Joan Miró de 1973, valorado en dos millones de euros.

El ámbito comisariado dedicado al arte latino también tiene cabida en nuestras líneas. Desde Rolf Art , la firma original de Buenos Aires, explican que «es importante nuestra participación porque venimos de lejos y ARCO tiene una buena representación del arte lationamericano». Su propuesta de exhibición presenta un diálogo histórico-contemporáneo-disruptivo entre tres reconocidos artistas argentinos: Sara Facio (1932), Marcelo Brodsky (1954) y Andrés Denegri (1975). Mientras que las fotografías de Facio y Brodsky rondan los 5.000 euros, la curiosa y aparatosa instalación fílmica de Denegri (de la serie ‘Eramos esperados’) eleva su valor hasta los 62.000, que permitirá a su comprador la visualización de varios episodios del Archivo General de la Nación con imágenes de la Semana Trágica de 1919.

No podemos olvidar pisar la moqueta del vecino (y más amplio) Pabellón 9. Aquí encontramos interesantes propuestas de la mano de T20 . «Las primeras impresiones son que estamos ante un ‘ferión’, es muy buena. El nivel es excepcionalmente alto viendo el nivel que hay fuera», expresa su director, Nacho Ruiz . Los precios de la firma murciana oscilan entre los 7.000 y 40.000 euros, nos confiesa otra de sus responsables, Carolina Parra . ‘Variaciones sobre la diana’, de Isidoro Valcárcel Medina (1937), tiene un valor de 40.000 euros, al igual que su compañero de galería, el barcelonés Francesc Torres , con una pieza histórica como ‘Taxi’, del año 2000.

De Murcia, directos a Palma de Mallorca (también Brasil). En Baró Galería hablamos con Solimán López , artista que trabaja con las materialidades digitales y que vendió por 14.500 euros ‘Tree Hash’, el primer NFT de ARCO el año pasado. En 2022 expone un proyecto de biotecnología con una molécula de aceite de oliva que presenta en su interior el ADN de una criptomoneda. En este mercado digital los precios oscilan entre pequeñas piezas por 4.500 euros, NFTs por 5.500 y la pieza estrella por 22.000 euros: ‘ Olea ’, una escultura móvil con tres litros de aceite con moléculas de ADN en suspensión y movimiento.

Desde Àngels Barcelona explican que el precio de sus obras se mueve desde los 4.000 euros de artistas jóvenes como Claudia Pagès hasta los más consagrados por 20.000 euros ( Esther Ferrer ). Aún así evitan puntualizar un coste más específico de las mismas y qué autores son los más cotizados en el mercado.

Patricia de Muga , de la galería también catalana Joan Prats , nos desvela el 'top tres' más valioso de su estand. El tercero en discordia se trataría del trabajo de Luis Gordillo ‘De REojo’ (2021) y un precio de 78.000 euros; le sigue de cerca un óleo de Hernández-Pijuan de 1989 denominado ‘Llindars ocre’ y, en lo más alto del ránking, se puede adquirir por la cifra de 150.000 euros la obra del cántabro Juan Uslé ‘ Soñé que revelabas ’, del año 2019.

Paloma González nos recibe en F2. «Estamos muy ilusionados ante una nueva edición tras la crisis sanitaria y esperamos que muchos visitantes se interesen por nuestro espacio», admite. El precio más alto en la galería heredera de Fúcares es de 40.000 euros y corresponde a una pieza del gallego Álvaro Negro. El más bajo son 550 euros, unos dibujos del hispano-israelí David Benarroch.

Desde Luis Adelantando nos detallan que el precio más elevado en su espacio es la obra histórica del pintor y fotógrafo vasco Darío Villalba (145.000 euros) y la más económica de su programa general, una pieza de barro de la escultora holandesa Folkert de Jong , de 2.500 euros. También en su Proyecto de Artista, dedicado a Irma Alvarez Laviada, tienen creaciones de 3.000 a 7.300 euros. La firma valenciana incluyó el IVA en todos los costes, en contraposición al resto de empresarios del arte.

La galería ubicada en Miguel Servet The Ryder presenta en ARCOmadrid 2022 un proyecto que imagina el futuro en colaboración con los coleccionistas. Así, su estand se convierte en un espacio para la especulación en el que imaginan las obras de una colección por venir. Destacan las obras de la artista israelí nacida en Ucrania Anna Perach . Ellos presentan unos precios muy competitivos en comparación al resto, pudiendo adquirir por 900 euros títulos como ‘Expansión’ (2021) o 'Sack of Bodies' (2022) de la creadora anteriormente citada. El trabajo más alejado pertenecería a Jonas Lund con un coste de 12.500 euros.

Cabe reseñar el espacio de la alemana Esther Schipper , que atienden reacios a dar cifras sobre sus principales creaciones. Una de sus responsables de comunicación confiesa que «a la galerista le encanta hablar de sus obras pero no quiere dar precios de ellas». ¿Hará lo mismo con los coleccionistas que ya pululan por los pasillos?

Por último, en el pasillo de Opening encontramos a los artistas más emergentes del panorama internacional. Una de las obras más controvertidas es de la peruana Wynnie Mynerva , de la galería limeña Ginsberg . ‘Cerrar para abrir' es un vídeo sobre el registro audiovisual de la artista en su procedimiento de 'reasignación sexual', cuando con 30 años decidió realizarse una operación de cierre de su propia vagina. Pero la obra principal es un gran cuadro de colores vivos, como el rosa y rojo, que emula la intervención a la que se sometió la creadora. Sobre el precio de su lienzo, admite no conocer la cifra exacta, pero puede rondar los 15.000 euros: «Nunca he hecho una pintura de este gran formato».

Otra de las firmas de este espacio es Una Galleria . La firma italiana dirigida por Marta Barbieri y Paola Bonino alberga creaciones que giran alrededor de los 2.000 y 5.000 euros, siendo ‘Espectrum’, de la portuguesa Andreia Santana , la actual en venta más cara, por 4.000 euros. Bonino apunta que su mejor obra ya había sido vendida en las primeras horas del montaje de su pequeño espacio en Opening.

Desde las siempre costosas apuestas de Leandro Navarro (dos millones de euros por un Miró), hasta las interesantes propuestas económicas de The Ryder ; pasando por las pinturas de Enrique Martínez (160.000 euros), las de Uslé (150.000) o las de la pintora lusa Paula Rego (800.000) son las obras más impactantes para el bolsillo del contribuyente. Aún así, queda patente que el arte es para todos los públicos y hoy cualquier interesado en la materia puede adquirir, por precios más acordes, un mismísimo Premio Nacional de Artes Plásticas como Santiago Sierra.

La feria, hasta el próximo domingo, invita a la sorpresa a sus visitantes en todos los recovecos y esquinas de los pabellones 7 y 9 de lo salones de Ifema.