LIBROS
Bauman, un alto funcionario comunista
Zygmunt Bauman es uno de los grandes pensadores de las últimas décadas, símbolo del devenir de Europa en el siglo XX. Izabela Wagner ha concluido una magnífica biografía que explica sus luces y sombras, en la que no escatima ningún detalle
César Antonio Molina
Zygmunt Bauman (1925-2017), en el año 2013, estando en Breslavia para ser homenajeado por la alcaldía, tuvo que escuchar los gritos de una multitud que lo increpaban. «¡Fuera el comunismo!¡Un Núremberg para los comunistas!¡Comunistas a la horca!¡Alcalde por qué lo has ... invitado!¡Fuera, fuera!». Bauman entonces pensó que volvía a estar en los años treinta del pasado siglo . De esta experiencia surgió su libro ‘Retrotopía’. Los manifestantes daban vítores a las antiguas Fuerzas Armadas Nacionales que habían luchado contra el nazismo y el comunismo durante la Segunda Guerra Mundial. Bauman, por el contrario, había sido oficial de la KBW , un cuerpo de élite de la inteligencia militar polaca comunista encargado de perseguirlos.
Muchos decían que equivalía a la Gestapo o los SS hitlerianos. Habían pasado setenta años de todos aquellos sucesos. A pesar de todo, el filósofo judío-polaco pudo dar su conferencia que llevó por título, ‘La utopía del siglo XX’ . En ella se refirió al final de las guerras europeas, al final de los conflictos raciales, a la consecución de una sociedad igualitaria, al progreso y la ecología.
Bauman había nacido en Poznan (Polonia). Desde niño sufrió el acoso antisemita. Polonia, en el año 1925, era un estado independiente tras ciento veintitrés años de haber sido repartida entre Rusia, Prusia y el imperio Austrohúngaro. Los judíos llevaban habitando estas tierras desde hacía más de mil años. El 33% de los habitantes de Varsovia, en los años veinte, eran judíos.
Huir de los nazis
En Poznan los judíos germanizados apoyaron a la República de Weimar frente a Polonia. Fueron calificados de traidores. La familia Bauman huyó de los nazis, se exilió temporalmente en la URSS, él fue soldado combatiente, hizo proselitismo comunista y apoyó la instalación del régimen comunista pro soviético en su país. Luego fue cambiando y, tras la muerte de Stalin, fue uno de los promotores de la democratización del régimen que nunca se llevó a cabo.
En la URSS, Bauman y sus padres, su hermana antes de la guerra ya se había ido a vivir a Palestina, estuvieron exiliados desde el año 1939 hasta el 44. Su segundo exilio y último lo pasó en la Gran Bretaña desde el año 1968 hasta su muerte en el 2017. En Polonia fue perseguido en su juventud , durante el nazismo, el comunismo, e incluso durante la democracia como hemos visto. Siempre fue un judío-comunista, luego socialista, laico, no sionista (de ahí las disputas con su padre), y polaco.
En el mundo líquido de Bauman todo cambia rápidamente, todo se vive en la incertidumbre
Sociólogo, filósofo, escritor y docente, dos de sus obras lo hicieron saltar a la fama internacional: ‘Modernidad y Holocausto’ (1989) y ‘Modernidad líquida’ (2000). Del marxismo y el comunismo enseñado a los soldados y universitarios, devino en sus teorías posmodernas basadas en el eclecticismo y el humanismo. Bauman defendió al individuo frente a la masa manipulada. Criticó a nuestra sociedad occidental porque su ideología induce a los ciudadanos a creer que su capacidad de actuar se ve realizada por medio del consumo, que solo procura una omnipresente y falsa ilusión sobre el poder de decisión del individuo. En el mundo líquido de Bauman todo cambia rápidamente, todo se vive en la incertidumbre, las relaciones sociales también son efímeras y avanza la soledad de las personas. Cambiar de lugar, de trabajo, adaptación permanente a lo que se nos demanda sin posibilidad alguna de poder intervenir en ello. Bauman no se pasó del comunismo al capitalismo de un día para otro. Evolucionó hacia u na mayor tolerancia ideológica que siempre tuvo, conservando sus valores y sueños de justicia social.
Sueño polaco
Bauman pertenecía a una vieja familia polaca. Hablaban polaco, estaban asimilados, y él estudió en un colegio polaco donde era el único judío. Discriminado por los compañeros se refugió en la lectura. En Polonia las leyes racistas estaban vigentes desde los años veinte. Él se adhirió a la Guardia de la Juventud Hebrea . Preparaban a los judíos para emigrar a Palestina y enseñaban el hebreo que él no hablaba. En Bielorrusia, durante la guerra, comprobó que el comunismo no discriminaba a los judíos. Como todo lo bueno duró poco. Estudió en la Universidad en Gorki. En 1943, a pesar de no ser ciudadano soviético, fue llamado a filas. Tenía dieciocho años. Su destino fue vigilar el tráfico en Moscú. Pidió la incorporación al ejército polaco que se estaba preparando en Sumy (Ucrania). También fue criticado por el hecho de unirse a los comunistas y no al ejército de Anders dirigido desde Londres por los exiliados democráticos.
Bauman salió de la Academia de Cadetes con el rango de oficial de complemento. Seguía creyendo en el espejismo de una Polonia independiente, sin racismo, igualitaria, democrática y socialista. Cuando entró con su regimiento en el campo de concentración de Majdanek sufrió tal impacto que le llevó a escribir ‘Modernidad y Holocausto’. Hasta finales de 1945 estuvo en el ejército. Fue herido y estuvo en el Berlín rendido. Luego fue incorporado al Cuerpo de Seguridad Interior (KBW), la policía política. Tenía veinte años. Una sombra que lo acompañará toda la vida. ¿Cómo hizo semejante cosa? El lo justificó en el sentido de que pensó que era lo mejor para construir el socialismo igualitario y antiracial. Así Bauman, durante bastantes años, se convirtió en uno de los líderes de la doctrina de la fe comunista. En los archivos de la policía no consta ningún acto violento por su parte . En el 1951 se afilió a la Liga Comunista Leninista de la Juventud de la Unión, antesala del Partido Comunista. Los judíos que se salvaron volvieron a sus casas. Sus conciudadanos las habían ocupado y se habían quedado con todas las pertenecías. A sus verdaderos dueños los apaleaban e incluso llegaron a asesinar a muchas personas. Sabedor de esto, Bauman se presentó en Poznan a recoger las pertenecías de su familia, vestido de militar, acompañado de soldados.
A los veinticinco años, Bauman, era uno de los más jóvenes comandantes del ejército. Los judíos no podían subir más. Fue expulsado por sionista
Pronto fue nombrado profesor de la Inteligencia Militar. Trasladado a Varsovia en el año 1947, inició sus estudios en la Academia de Ciencias Políticas. En la universidad conoció a Janina Lewinson, también judía-polaca, con quien se casó y vivió más de sesenta años. Ella había sobrevivido al Holocausto y escribió un libro sobre ello. Su padre y un tío fueron asesinados por los soviéticos en Katyn. Janina trabajó en la Junta de Cinematografía en varios departamentos, entre ellos, el de censura. Denunció a una compañera, de lo que siempre se arrepintió.
A los veinticinco años, Bauman, era uno de los más jóvenes comandantes del ejército. Los judíos no podían subir más. Fue expulsado por sionista. Había acompañado a su padre, de visita en Varsovia pues vivía en Israel, a la embajada israelí. Bauman siguió en la universidad haciendo sus estudios, el doctorado y dando clases. Schaffer representaba el ala más comunista de los profesores. Kolakowski, más moderado, era su ayudante. Este y Bauman se hicieron muy amigos. En el exilio se separaron pues Kolakowski volvió al catolicismo y defendió posturas capitalistas . Hochfeld estaba del lado revisionista. La muerte de Stalin en 1953 y la presencia de Gomulka al frente del gobierno polaco, trajeron aires de libertad. Parecía que todo iba a cambiar, pero no fue así. Las reivindicaciones de la sociedad polaca se manifestaban por todos los sitios y eso preocupaba no solo al gobierno nacional sino también a Moscú. Todo estalló con la guerra de los seis días. Los polacos estaban con Israel, mientras que Moscú se puso de parte de Egipto.
Apátrida
Gomulka no tuvo más remedio que intervenir ante las amenazas soviéticas. Bauman y otros muchos volvieron a ser acusados de agentes israelíes y se les obligó a abandonar el país . En 1968, Bauman y su esposa devolvieron los carnets del Partido Comunista y partieron camino de Israel. Les quitaron su nacionalidad y Bauman se consideró un apátrida. El ir a Israel era una muestra de agradecimiento por haberlos amparado en tal difícil trance. Estuvieron allí tres años hasta que se trasladaron definitivamente a Leeds. No encajaron en la sociedad israelí ni tampoco en su mundo universitario. Consideraban mal a los judíos sobrevivientes. Además el filósofo había apoyado a un partido político denominado Maki: comunista y binacional. Defendía radicalmente la coexistencia pacífica entre árabes y judíos basada en la igualdad de derechos. En el año 1971, al llegar a Leeds, comenzó una nueva vida. No era una universidad de prestigio, pero Bauman se lo dio y además la moldeó a su manera. Murió cumpliendo uno de sus grandes deseos, conocer al Papa Francisco del que hizo grandes alabanzas .
Límite de sesiones alcanzadas
- El acceso al contenido Premium está abierto por cortesía del establecimiento donde te encuentras, pero ahora mismo hay demasiados usuarios conectados a la vez. Por favor, inténtalo pasados unos minutos.
Has superado el límite de sesiones
- Sólo puedes tener tres sesiones iniciadas a la vez. Hemos cerrado la sesión más antigua para que sigas navegando sin límites en el resto.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete