Temor al boicot sindicalista en los Goya
El comunicado de la Unión de Actores para dinamitar la gala del próximo domingo causa malestar en el sector
El pasado fin de semana, Enrique González Macho , presidente de la Academia de Cine , concedía una entrevista a la agencia EFE en la que pedía explícitamente al sector que la ceremonia de los Goya que se celebrará el próximo domingo no se convierta en otro «No a la guerra», en alusión a la situación vivida en 2003 durante la gala presentada por la compañía de teatro Animalario .
González Macho aseguraba que, aunque haya motivos suficientes para un «No a la crisis, a los recortes o al IVA», eso sería dar motivos a los que quieren, decía, «acabar con nosotros».
Sin embargo, parece que el discurso del presidente de la Academia no fue malinterpretado por ese sector «duro» («aznarista», llegó a decir) del PP que estaría, según González Macho, «encantado de que desapareciéramos», sino por su propia gente.
Y es que, solo 24 horas después de que se publicara la entrevista, la Unión de Actores hacía público un comunicado en el que llamaba «a la reflexión» a todos los participantes en los Goya que presentará Eva Hache para que hablen de «lo que sucede».
En el texto, el sindicato, que tiene a los actores Alberto San Juan y Guillermo Toledo como responsables de Acción Sindical e Igualdad (los mismos que ejercieron de anfitriones en los Goya del «No a la guerra» de Irak), sugería que el próximo domingo «podría ocurrir que dijéramos ‘No a los recortes’».
Un comunicado sin firma
«Desde el máximo respeto a la libre decisión de cada uno de hacer o decir lo que le venga en gana llamamos a reflexionar sobre la situación que estamos viviendo y la responsabilidad de cada uno ante la misma», aseguraba el comunicado, que no aparecía firmado. Finalmente, decían tener «la responsabilidad de aprovechar el altavoz del que disponemos y del que tanta gente carece» para denunciar la reforma laboral, el paro, «los recortes en educación» o «la injusticia de los desahucios».
Pero tan «solidario» gesto de la Unión de Actores no ha sido bien recibido por el sector, inmerso en un delicado proceso de negociación con el Gobierno sobre el futuro marco de financiación de la industria. Es más, hay quien percibe en la redacción del comunicado un tufillo mafioso que busca, una vez más, «politizar el sector y mirar hacia atrás en vez de hacia adelante».
Dichas fuentes catalogan de oportunista el acto y no entienden cómo un sindicato (que tiene sus propios premios) busca acaparar focos sin temor a dinamitar puentes de difícil reconstrucción. Y es que, como en cierta ocasión le dijo Steven Spielberg a Shia LaBeouf , «hay momentos para tener una opinión como individuo y momentos para vender coches».
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