El Cervantes de Moscú sigue abierto «con muy bajo nivel de actividades»

«La decisión que hemos tomado en esta situación de crisis con Rusia no es la de cerrar el centro, sino esperar tranquilamente a que nos expulsaran para que, cuando mejore la relación internacional, regresar. Se trata de separar las relaciones con una persona tan repudiable como Putin de un país como Rusia, porque ya hemos visto las dificultades con los cierres de Gibraltar y Siria, y si se cerraba hoy, igual no se volvía en tres o cuatro años», justificó García Montero.

En ese sentido, el director del Cervantes explicó que están a la espera de la Unión Europea para poder retomar la actividad en el centro de Gibraltar, que cerró en el año 2015, y que las próximas aperturas pasan por Los Ángeles y Seúl. El primero, largamente anunciado, ya tiene fecha: la Reina lo inaugurará el 12 de diciembre. El centro número 63 del Cervantes se unirá a los de Nueva York, Chicago y Alburquerque, estará situado junto a los estudios de Hollywood y estará dirigido por Luisgé Martín, quien ya cuenta con el apoyo de una jefa de estudios y una administradora para «buscar acuerdos» con distintas instituciones.

«Hemos conseguido también aprobar una partida para abrir un centro en Seúl. Esperemos que pueda pasar pronto al Consejo de Gobierno. Tener un Cervantes en Corea es muy importante para responder a la demanda de español en Asia», añadió el director de la institución, que destacó la apertura el año pasado de otro centro en Dakar, el primero desde 2004: «Es el primer centro en el África subsahariana, donde se va a multiplicar por muchos millones su número de habitantes. En ese sentido, extender el español por esa zona es fundamental para asegurar su posición dominante».

García Montero señaló que una de las prioridades del Cervantes para este nuevo curso es poner en marcha el Observatorio del Español en La Rioja, al que se ha asignado una partida de unos 3 millones de euros del Perte de la Nueva Economía de la Lengua. «Hemos pedido una plantilla de siete personas para que, en distintas escalas, puedan coordinar y unificar todos los proyectos que tenemos pensado establecer con las distintas universidades del Estado español», explicó el director del Cervantes. Entre las funciones de este nuevo organismo, están analizar las posibilidades de la lengua y abordar las nuevas demandas de la inteligencia artificial.

En cuanto a la situación económica del Cervantes, la institución espera contar con 140 millones de presupuesto para este nuevo curso, seis más que los contemplados actualmente, aunque García Montero lamentó que están muy lejos de las cifras que se manejan en países como Alemania o Francia: «Tenemos que seguir dando la lata, porque cuando uno está en la gestión y hay que tratar dignamente a la plantilla, no hay nada más poético que el dinero –dijo–. No hay nada más poético que decir a los trabajadores que nuestra preocupación es facilitar un tratamiento digno en sus condiciones laborales. No hay nada más poético que pelear para que el presupuesto del Cervantes se vaya acercando a la mitad de lo que invierten en su lengua los alemanes, los franceses o los italianos».

Del curso académico 2021-22, el Cervantes destaca las casi 120.000 matrículas expedidas, un 4,56 por ciento más respecto al año anterior, o el incremento del 16,7 por ciento entre los que han obtenido el diploma DELE. Respecto a la plantilla del Cervantes, su secretaria general, Carmen Noguero, lamentó que les está costando recuperar las personas que han causado baja: «El Covid ha tenido un efecto bastante duro. Aunque realizamos convocatorias, a veces los abandonos superan lo que conseguimos reponer».