De James Bond y Mata Hari a Snowden: Caixaforum tiende un puente entre el cine y el espionaje con 'Top Secret'
La muestra vincula mito y realidad de los espías desde la mirada de grandes cineastas
Los 'gadgets' de espías más asombrosos de 'Top secret. Cine y espionaje'
Adrián G. Peñacoba
Madrid
Las misiones de espías son algunos de los secretos mejor guardados de la historia. Su poderoso efecto magnético ha arrastrado a decenas de cineastas talentosos, que han soñado elegantes y seductores galanes o sensuales bailarinas exóticas como agentes encubiertos. Pero detrás hay más que James Bond ... o la tan mitificada Mata Hari. 'Top secret: cine y espionaje', vincula leyenda y realidad en un juego de espejos abierto al público desde hoy hasta el 22 de octubre en el Caixaforum.
«Muchos dicen que el espionaje es el trabajo más antiguo del mundo. En el cine, es el género más antiguo, porque se encuentra desde sus orígenes hasta el día de hoy», adelanta Matthieu Orleán, comisario adjunto de la exposición y colaborador de la Cinémathèque francesa, encargada de traer la exposición a España junto a la Fundación 'la Caixa'.
Alfred Hitchcock, Jean-Luc Godard, Fritz Lang, Paul Greengrass o Ridley Scott son algunos de los directores que alimentaron la leyenda de los espías, dotándolos de todo tipo de artilugios para conseguir la información necesaria o escapar de las peores situaciones imaginables. La exposición combina carteles y escenas de algunas de las películas más famosas de espías de todas las décadas con objetos reales utilizados por aquellos que nunca salieron de las sombras. Desde Fialka, máquina de cifrado de mensajes soviética, heredera directa de la Enigma de Alan Turing , hasta un paraguas búlgaro, en cuya punta se untaba un veneno que, mediante un picotazo en el tobillo, llegaba a ser mortal en cuestión de minutos. La mayoría de objetos utilizados por los servicios secretos tienen su correspondiente referencia cinematográfica, en este caso, 'Descifrando Enigma' (2014) y 'El golpe del paraguas' (1980).
«El cine es un arte que muestra, proyecta y divulga, está en el lado de la luz. El espionaje juega con lo oculto y está en el lado de la sombra. Pero hay muchos puntos en común», argumenta Alexandra Midal, comisaria de la Cinémathèque. Aunque puedan parecer antitéticos, ambos mundos están llenos de historias entrelazadas. La actriz Hedy Lamarr, que revolucionó el mundo del séptimo arte con el primer orgasmo en pantalla, acabó construyendo las bases para inventar tecnologías de contrainteligencia que años más tarde, se darían a conocer al público como el GPS y el Wi-Fi.
Algunas de estas historias se han podido recuperar a partir de la desclasificación de documentos secretos muchas décadas después. Así se supo que Greta Garbo, que interpretó a la figura más conocida y mitificada de la historia de los espías, Mata Hari, fue también una agente al servicio de la inteligencia norteamericana. También se descubrió que Cary Grant, quien –casualidad o no– rechazó encarnar a James Bond, había recibido pagos del gobierno de EEUU con el fin de recabar información sobre los países que visitaba gracias a su estatus de estrella.
También hay un homenaje especial a Chelsea Elizabeth Manning, exsoldado estadounidense y analista de inteligencia que filtró miles de documentos sobre las guerras de EEUU en el Medio Oriente, lo que le valió una condena de 30 años de cárcel. Durante su estancia en prisión, Manning envió muestras de su ADN a la artista Heather Dewey-Hagborg, que lo utilizó para crear una treintena de retratos mediante tecnología genética y que se pueden apreciar en la última sala de la exposición.
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Pedro García Cuartango
Al final de la muestra, el visitante averiguará que no sólo ha sido un sujeto pasivo de la cuestión, sino que el espionaje se ejerce desde el sigilo y la distracción. Nuestro entorno viene codificado por un pequeño aparato que guardamos en nuestro bolsillo. Nunca hubo una época en la que la vigilancia fuera tan fácil. Surge la duda obligatoria: ¿Cómo se siente descubrir que has sido espiado?
La Fundación 'la Caixa' también ha preparado una serie de actividades alternativas para que los amantes del espionaje puedan seguir indagando en sus universos clandestinos. A partir del 28 de septiembre se abre un ciclo de conferencias que acogerá historiadores que dibujarán la historia bajo la lupa del espía, en el contexto de la Primera y Segunda Guerra Mundial y del franquismo. También, Isabel Martínez Carraza, miembro del CNI, explicará los orígenes de la institución el 17 de octubre.
Por otro lado, se acompaña la muestra con un ciclo de cine con películas de género emblemáticas: 'Alarma en el expreso' (1938), 'Garbo, el espía (2009), 'Bajo el fuego' (1983), 'La vida de los otros' (2006) y 'La mujer espía (2020). También hay 'noches temáticas', tertulias y cineteca para los más pequeños. Incluso un escape room «para familias de espías», los días 12, 13, 14 y 15 de octubre. Consulta aquí, el calendario de eventos.
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