Un viaje por las arquitecturas que nos alimentan

Eduardo Castillo-Vinuesa y Manuel Ocaña desvelan su proyecto para el pabellón de España en la 18 Exposición Internacional de Arquitectura de la Bienal de Venecia

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Amorim Cork. Oporto © Pedro Pegenaute

La reinauguradas Arquerías de Nuevos Ministerios en Madrid, tras su rehabilitación, fueron el escenario elegido para la presentación ayer del pabellón de España en la 18 Exposición Internacional de Arquitectura de la Bienal de Venecia, que se inaugurará el 19 de mayo y ... tendrá lugar del 20 de mayo al 26 de noviembre. La comisaria de esta edición, Lesley Lokko, ha escogido como tema 'The Laboratory Of The Future'.

El jurado del concurso de ideas para el pabellón de España eligió ganador el proyecto 'Foodscapes', comisariado por los arquitectos Eduardo Castillo-Vinuesa y Manuel Ocaña, cuyo lema es 'Al comer, digerimos territorios'. Su propuesta, que aborda cuestiones relacionadas con la forma en que producimos, distribuimos y consumimos alimentos, es «un viaje de exploración por las arquitecturas que nos alimentan, desde los laboratorios domésticos de nuestras cocinas hasta los vastos paisajes operativos que nutren nuestras ciudades«. Cubre, pues, dicho viaje por esta arquitectura metabólica toda la cadena alimentaria: plantaciones, invernaderos, mataderos, autopistas y carreteras, supermercados, cocinas...

El origen del proyecto es el libro 'Synergetic Stew: Explorations in Dymaxion Dining', de R. Buckminster Fuller (1982), reeditado con motivo de su 125 aniversario. También, un viaje que Castillo-Vinuesa hizo a Perú y, concretamente, a la ciudadela de Machu Picchu. Advierte el comisario que «la forma en que producimos los alimentos, los distribuimos y consumimos moviliza nuestras sociedades, da forma a nuestras metrópolis y transforma nuestras geografías de forma más radical que cualquier otra fuente de energía. 'Foodscapes' mira al futuro para explorar otros modelos posibles: unos capaces de alimentar al mundo sin devorar el planeta».

El arquitecto desgranó las tres claves del proyecto, que, aclaró, no va de comida, sino de la arquitectura del sistema alimentario: cinco cortometrajes, un archivo en forma de recetario (recetas totales, las llaman) y un programa público de conversaciones, debates, eventos e investigación colectiva en torno a cómo rediseñar ese sistema en el futuro para que sea más sostenible.

Los comisarios han invitado a un grupo de artistas multidisciplinares para que hicieran sus propias investigaciones en torno a este asunto: los centros de residuos, la cadena de frío, los invernaderos en lugares como El Ejido (Almería), el deterioro del suelo... Los cinco cortos (digestión, consumo, distribución, producción y base o suelo) irán en las salas laterales del pabellón, mientras que las diez recetas totales estarán en la nave central, como un gran gabinete de curiosidades. Estas han sido realizadas por un grupo de arquitectos eclécticos. Una de ellas se centra en la primera granja de pulpos en cautividad en las Islas Canarias. Otra, en el polvo de proteínas que consume ya el 14% de la población española: 7 millones beben batidos de proteínas. Una tercera receta aborda la importancia de los bosques y de la madera en la producción de vino: «Sin madera no habría vino». Las imágenes del proyecto fueron tomadas por el fotógrafo de arquitectura Pedro Pegenaute, que aceptó el reto de visitar (y fotografiar) 50 lugares.

El jurado encargado de seleccionar el proyecto para el pabellón español destacó tanto la originalidad como la profundidad del planteamiento de la exposición: «'Foodscapes' ofrece un discurso real, inteligente e innovador que promueve la investigación y promete una experiencia de aprendizaje en la que la arquitectura española y el territorio nacional son los protagonistas. España ocupa una posición estratégica como laboratorio para un futuro más sostenible en cuanto a los sistemas alimentarios y las arquitecturas que los construyen, tanto por la variedad de su producción agroalimentaria como por la exposición de nuestro país a la crisis climática. El proyecto revela una voluntad práctica de crear una arquitectura capaz de cambiar nuestra visión del mundo».

El Pabellón de España está organizado por la Dirección General de Agenda Urbana y Arquitectura del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Acción Cultural Española (AC/E) y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Aecid), en colaboración con TBA21 Thyssen-Bornemisza Art Contemporary y con el apoyo de la European Climate Foundation y la Fundación Arquia.

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