El Prado reordena su política de depósitos, pero no abrirá subsedes ni 'mini-Prados'

'El Prado extendido' supone una reordenación integral de la política de depósitos del Prado en otras instituciones de España. Hasta ahora había depósitos sin sentido (obras de artistas de una comunidad en otra, incluso sin haberlos solicitado), un desequilibrio territorial, una desconexión con el Prado... amén de una falta de protección de obras en algunos casos. Una pintura de Garnelo fue dañada por un balonazo en un instituto. Se ha cedido al museo del artista en Montilla (Córdoba).

El objetivo de este proyecto: fomentar el carácter nacional del Prado mediante la presencia y visibilidad de la colección en todo el territorio español. Se han revisado los criterios hasta ahora vigentes, que habían quedado obsoletos, y se han puesto en marcha iniciativas de colaboración con las instituciones depositarias. Así, habrá actividades conjuntas (expositivas y académicas), estancias formativas en el Prado de los profesionales de sus plantillas... Una relación de diálogo, que será continuada, sin fecha de caducidad, advierte Falomir. Como contrapartida, el Prado exigirá garantizar el estado de conservación de los fondos, así como su exhibición (que no queden en los almacenes). En algunos casos habrá salas con el nombre del museo y se incluirá el logo ('el Prado extendido'). Se priorizarán los depósitos en instituciones museísticas.

Actualmente, el Prado exhibe entre 1.600 y 1.700 obras en sus salas. Hay unas 3.000 en almacenes y3.446 depositadas en 279 instituciones. El 57% se halla en museos; el 30%, en administraciones públicas; el 7%, en instituciones religiosas y el 6%, en embajadas. El 82% es pintura de los siglos XVI a XIX; el 7%, artes decorativas; el 4%, artes gráficas: el 5%, escultura y el 2%, restos arquitectónicos. Por número de bienes depositados, la lista la encabeza Madrid (1.301), seguida por Andalucía (386), Galicia (334), Cataluña (250), Castilla y León (235), Castilla-La Mancha (133). Aragón (110), Comunidad Valenciana (108), País Vasco (94), Canarias (93), Asturias (75), Extremadura (56), La Rioja (28), Islas Baleares (26), Murcia (8), Navarra (1); embajadas y consulados (208)... Hay depósitos en toda España, excepto en Cantabria, y las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla.

El Monasterio del Paular tiene 52 depósitos del Prado. Son obras pintadas por Vicente Carducho para este monasterio. El Museo de La Coruña cuenta con 24 obras de Sotomayor. Dice el director del Prado que un ejemplo de cómo deben ser estos depósitos es el Museo Balaguer de Villanueva y Geltrú, con 38 bienes. Entre los proyectos piloto, el Museo de Bellas Artes de Asturias, en Oviedo, con 54 obras en depósito, y el Museo de Bellas Artes Gravina (MUBAG) de Alicante, con 28. En general, se prevé un cambio de localización de miles de obras.

Explica Miguel Falomir que la idea es «que tengan obras que quieran tener». No se descolgará ninguna de las salas del Prado. Sí podrían salir algunas de los almacenes de la pinacoteca («las hay, y bastantes»), siempre que no vayan a exhibirse en el futuro Salón de Reinos. El presupuesto de este proyecto correrá a cargo de las instituciones receptoras, el Prado y patrocinios privados. Ya se han comunicado con las Comunidades Autónomas para que digan qué depósitos de los que tienen les interesan y cuáles no. De momento, solo ha contestado Andalucía. Aún no se ha devuelto ningún depósito. El siguiente paso será preguntar a las diputaciones, a las que se ofrecerá aquellas obras que les puedan interesar. Finalmente, habrá conversaciones a nivel local.

En la década de 1860, con motivo del cierre del Museo de la Trinidad, llegó al Prado un aluvión de obras, lo que permitió una política de depósitos fuera del museo, pero sin criterio museológico ni científico. La revisión sistematizada de los depósitos del Prado se impulsó en 1978. En 2019, con motivo de la celebración de su bicentenario, el Prado quiso reafirmar su carácter nacional con actividades como 'De gira por España' (se envió una obra maestra a cada Comunidad Autónoma, y a Ceuta y Melilla) y 'El Prado en las calles'. «Hubo perplejidad y sorpresa, pues muchos españoles no sabían que había obras del Prado en sus ciudades», dice Falomir.

El ministro de Cultura, Miquel Iceta, advierte: «Mi presencia hoy aquí no es ya para apoyar, es para aplaudir y para conocer. Saben ustedes que desde siempre he defendido que entre las funciones de los museos nacionales está la de hacerse presentes en todo el territorio, para que todos los ciudadanos españoles puedan sentirlos suyos. Desde el Ministerio animamos a todos los museos que tienen el título nacional a que sean realmente de la nación y no de un único código postal».

Preguntado por ABC por el tema de la descolonización de los museos, negó como San Pedro tres veces, repitiendo esta frase «En el Ministerio no hay ningún grupo de trabajo que esté abordando ese tema» hasta en tres ocasiones. ¿Miente entonces el director del Museo de Antropología? «Pues no sé. Creo que en el marco de unas jornadas de cultura y ciudadanía hubo un debate en el que surgió esa cuestión. En nuestro ministerio no censuramos debates. Y esto solo lo digo una vez. Una vez hablé, y también causó cierto interés en algún periódico, de federalismo cultural, pues quizás hubiera sido mejor hablar de desconcentración de nuestras grandes instituciones museísticas».

Sobre el atentado contra 'Las Majas' dijo Iceta: «Quiero felicitar al museo del Prado por su reacción y la agilidad con la que resolvió el conflicto. Eso dice mucho de esta institución. El conjunto de instituciones que depende del Estado han recibido instrucciones para extremar las precauciones. A lo que no estamos dispuestos es a cerrar ningún museo. Lo que hemos hecho es reforzar las medidas de seguridad. Quiero agradecer al Ministerio del Interior el esfuerzo que está poniendo en esa dirección y conseguir entre todos minimizar hasta erradicar esas actuaciones. Hay muchas maneras de expresar una reivindicación sin poner en riesgo el patrimonio de todos. Merece la pena hacer esa reflexión a todos esos activistas que, probablemente llevados por una buena intención, no caigan en el error de poner en riesgo lo que es de todos, incluso de dañar su causa. Ser el sexto o el séptimo país al que llegó esta ofensiva nos permitió prepararnos un poco mejor. Vamos a tener mayor vigilancia, pero no podemos poner un policía al lado de cada cuadro. Vamos a filtrar lo mejor que seamos capaces el acceso. El objetivo de los museos es mostrar las obras que atesoran. Vamos a poner todas las precauciones, pero no nos vamos a negar a la función fundamental de los museos, que es poner a disposición de la ciudadanía un patrimonio que es de todos».

En cuanto al cierre de numerosas salas en los museos estatales, la directora de Comunicación de su gabinete interrumpe la charla para anunciar que el martes se abrirán las de Egipto en el Arqueológico Nacional. «Ah, mira, tenéis titular», comenta Iceta sorprendido. «Tenemos museos muy grandes, con mucha obra, y requieren de mucha dotación de personal. Estamos haciendo un esfuerzo muy, muy grande en ampliar las plantillas de los museos y en algunos casos que se cubran los puestos previstos. Eso va a ir permitiendo abrir todas las salas en todos los museos. Lo que toca es poner los medios para que sea una realidad».