'Nada es lo que parece' si es captado por la cámara de Pablo Crespi
El fotógrafo madrileño expone 33 de sus imágenes sobre el movimiento, la naturaleza y el agua en la Fundación Pons
No parecen fotografías, tal vez porque como bien advierte Pablo Crespi (Ávila, 1960) en el título de su exposición, 'Nada es lo que parece'. Las 33 fotografías que el artista muestra hasta el 10 de marzo en la sede de la Fundación Pons no han sido manipuladas digitalmente, en el sentido de que Crespi no ha quitado, ni ha puesto o mezclado las imágenes en postproducción. «Me gusta obtener el resultado en la cámara», dice. Y sin embargo, esa luz, ese color, esas texturas en ocasiones no parecen reales.
«Parto de una realidad para crear otra distinta y me muevo en el mundo de la abstracción», explica a ABC este artista que aunque nació en Ávila vive en Madrid desde que tenía dos meses. Para él «lo importante es lo que representan las imágenes, no lo que son».
Las imágenes expuestas en el número 138 de la calle Serrano se agrupan en torno a tres grandes temas: 'El movimiento', la sección que ha bautizado como 'Encantado en el bosque' y 'Acuarelas'. En la primera, no es el objeto sino la cámara la que se desplaza para que ocurran cosas como que los edificios crezcan, los túneles se tiñan de verde, o se llegue a plasmar el viento en la fotografía. Crespi explica que surgió durante la pandemia, cuando al ver limitados sus movimientos, se centró en lo urbano.
'Encantado en el bosque' describe esa visión personal del entorno natural que tiene el fotógrafo, su particular punto de vista de la naturaleza. «Es una paciente búsqueda de imágenes que me voy encontrando y me sugieren algo», comenta.
El artista, que ya en su exposición 'Agua' presentó 23 obras en las que este elemento era el creador de formas, texturas y colores, vuelve a explorar en 'Acuarelas' la capacidad que tiene la superficie del agua para convertirse en lienzo donde la refracción, los reflejos, la descomposición de la luz y los fondos 'pintan' las fotografías.
Sorprender
«En la búsqueda de nuevas imágenes, intento ofrecer una visión distinta, que sea algo que nunca hayas visto antes. Trato de ser original dentro del actual panorama fotográfico y en definitiva, sorprender«, subraya Crespi.
Aunque lleva haciendo fotografías «desde siempre» y ya con 23 años mostró por primera vez en público 25 retratos con dobles exposiciones sobre el positivo, partiendo de una cámara Polaroid, desarrolló posteriormente su carrera como realizador de televisión. Desde hace cuatro años, sin embargo, está centrado en la fotografía.
Esta es su segunda exposición en la Fundación Pons, que nació en 2005 para devolver a la sociedad los 75 años de experiencia y conocimiento acumulado de las empresas Pons en sus diferentes áreas de actividad. Según señalan desde la propia fundación, su objetivo es «promover activamente la educación en valores relacionados con el fomento responsable de las nuevas tecnologías; la concienciación, enseñanza e investigación en seguridad vial y movilidad responsable; el impulso de la I+D+i, la defensa y desarrollo de la propiedad industrial e intelectual y el apoyo decidido a los valores emergentes del arte».
En 2020 iniciaron una nueva etapa acogiéndose a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas, centrados en acabar con la pobreza, garantizar una vida sana y promover el bienestar para todos, proteger el planeta y mejorar la vida y las perspectivas de futuro de todas las personas en todo el mundo.
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