Cien años de García de Paredes, el hombre que blindó el 'Guernica'

El Museo ICO (Calle Zorrilla, 3) le dedica, en el centenario de su nacimiento, una retrospectiva de su arquitectura culta y silenciosa, en colaboración con el Museo Reina Sofía, al que la familia del arquitecto donó en 2021 su archivo, que ha sido catalogado. Unas 300 piezas de las más de 6.000 que conforman ese legado se incluyen, junto con otros préstamos de instituciones y particulares, en la exposición, cuya comisaria es su hija, Ángela García de Paredes, también arquitecto. Bajo el título 'José María García de Paredes. Espacios de encuentro', se exhiben, hasta el 12 de enero, planos, croquis, maquetas, cartas, cuadernos de viaje... En un expositor de metacrilato que atraviesa la primera sala se muestran 200 de los 2.200 dibujos catalogados, que parecen flotar. Es como entrar en la cabeza el arquitecto: admirar su proceso creativo.

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Pero, como subraya la comisaria, la exposición revisa no solo cuatro décadas (de 1950 a 1990) del trabajo de un solo arquitecto, sino también el de otros colegas con los que trabajó en proyectos compartidos (Rafael de la Hoz, Alejandro de la Sota, Miguel Fisac, Javier Carvajal...), artistas plásticos a los que conoció (Lucio Muñoz, Pablo Palazuelo –propuso un conjunto escultórico para la fachada norte del Auditorio Nacional–, José Guerrero, Manuel Rivera, Eusebio Sempere....). Todos ellos formaron parte de la vibrante escena cultural de la época. La exposición, advierte la comisaria, pretende «transmitir el trabajo de este grupo de arquitectos y artistas apenas conocidos fuera de España».

Mención especial merece la figura de Manuel de Falla, con quien mantuvo una vinculación muy especial. Tío de su esposa, Isabel de Falla, en cuyas manos acabó el legado del célebre músico, García de Paredes lo consideraba su maestro de arquitectura. No solo construyó un auditorio con su nombre en Granada, sino que hizo dibujos para la escenografía de 'Atlántida', obra que Falla dejó inacabada. Cuelgan algunos en la exposición. Asimismo, tiene un papel destacado en su carrera la ciudad de Granada, a través del pintor Miguel Rodríguez-Acosta, con quien coincidió en la Academia de España en Roma. Construyó su hermoso Carmen en el Albaicín, hizo varios centros de enseñanza media, y diseñó un Teatro del Generalife, un espacio musical al aire libre que nunca se construyó.

La música es uno de los núcleos centrales en la carrera de García de Paredes y de la muestra. Su discurso de ingreso en la Academia de Bellas Artes de San Fernando en 1984 se tituló 'Paseo por la arquitectura de la música'. Además de los ya citados en Madrid, Valencia y Granada, es autor de otros auditorios en Cuenca o Murcia. Participó, junto con José Luis Aranguren, José Antonio Corrales, Alejandro de la Sota y Ramón Vázquez Molezún, en el concurso para el Teatro de la Ópera de Madrid, que finalmente no se construyó. Y fue autor de la Sala Juan de Villanueva del Museo del Prado, que ya no existe.

Realizó también proyectos eclesiásticos, tanto en solitario como con otros colegas: iglesias y conventos en Vitoria, Cuenca, Málaga, Madrid... «Recibió un aviso de excomunión –cuenta su hija–, porque decía que la Iglesia no era la casa de Dios, sino la de las personas que acudían a ella».

Quizás no muchos sepan que García de Paredes fue el autor de la instalación que blindó el 'Guernica' a su llegada a España en 1981, por encargo de Javier Tusell, entonces director general de Bellas Artes. Recibió consejos de Josep Lluís Sert, que incluyó la obra de Picasso en el Pabellón de España en París de 1937. García de Paredes era miembro del equipo asesor para las obras del Prado y fue el responsable de la instalación del 'Guernica' en el Casón del Buen Retiro, bajo la bóveda de Luca Giordano. No se sabe qué pasó con la urna original, de vidrio triple 'antidisturbio' de 18 milímetros de espesor. Las dimensiones de las lunas eran inferiores a las del cuadro de Picasso. Se exhibe, en su lugar, 'Urna para el Guernica', de Fernando Sánchez Castillo, préstamo del Centro de Arte Dos de Mayo (CA2M) de Móstoles. Cuelgan además reproducciones de las crónicas periodísticas (entre ellas, las de José María Carrascal en ABC), que relataron paso a paso el viaje a España del último exiliado.