Suscríbete a
ABC Cultural

El retrato de una cortesana como santa que pasó por las manos de dos cardenales

El Museo Nacional Thyssen-Bornemisza presenta el resultado de la restauración y estudio técnico de una de las obras más emblemáticas de su colección, «Santa Catalina de Alejandría»

El Museo Thyssen-Bornemisza ha presentado el resultado de la restauración de «Santa Catalina de Alejandría», de Caravaggio EFE

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Si la vida de Michelangelo Merisi, más conocido como Caravaggio , fue de novela, no menos apasionantes fueron sus geniales pinturas. Hacia 1598-99 dio vida a una Santa Catalina de Alejandría muy particular en un óleo sobre lienzo, de 173 por ... 133 centímetros, que fue encargado en Roma por el cardenal Francesco Maria del Monte , uno de sus principales mecenas. Hasta ahí, nada especial. Salvo porque la modelo elegida era Fillide Melandroni, célebre cortesana de la época, que formaba parte del círculo de amistades del pendenciero pintor y a la que retrató en más ocasiones: es la María Magdalena de «Marta y María Magdalena», del Detroit Institute of Arts; la Judit de «Judit y Holofernes», de la Galleria Nazionale d’Arte Antica de Roma, y la diosa Flora en una obra que ha desaparecido: fue destruida en Alemania durante la II Guerra Mundial.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia