La pintura del Romanticismo español sale del confinamiento

La galería Caylus de Madrid lleva años reivindicando este periodo artístico injustamente olvidado, defendiéndolo, generando interés y reconocimiento, pues, según sus responsables, son obras tan buenas, de tantísima calidad, como las francesas o italianas del periodo. Así, han vendido relevantes piezas al Prado, el Museo del Romanticismo, la Fundación María Cristina Masaveu Peterson, el Museo de Historia de Madrid (quince vistas de Madrid)..., y lo que resulta más sorprendente, a alguna institución extranjera: un retrato de María Isabel de Borbón, pintado por Vicente López, fue adquirido por el Fitzwilliam Museum de Cambridge. Y es que es un tipo de pintura prácticamente desconocida fuera de España.

Hasta el 29 de abril, la galería exhibe en su sede (el número 24 de la calle Conde de Aranda de la capital) la exposición 'Rostros y miradas del Romanticismo español' , que reúne medio centenar de obras del Romanticismo español (periodo que abarca el segundo y el tercer tercio del XIX) de artistas conocidos como Vicente López, José y Federico de Madrazo, Antonio María Esquivel, Genaro Pérez Villaamil o Eugenio Lucas Velázquez, pero también de otros que supondrán una sorpresa para el gran público. Es el caso de José Gutiérrez de la Vega, al que se dedica toda una sala; Antonio Cavanna o Manuel García y Martínez, 'Hispaleto'. Todos los cuadros expuestos son exportables. 

No hay en nuestro país muchos coleccionistas de este periodo, ni una gran demanda. Y ello se refleja en las tasaciones de las obras, que son muy asequibles. La horquilla de precios de las pinturas expuestas, de una gran calidad, oscila entre 3.500 y 80.000 euro s. Las obras de los artistas españoles del XIX alcanzan precios muy inferiores a piezas similares de artistas franceses o italianos. Se ha vendido en torno al 20% de las piezas. El Estado no ha adquirido de momento ninguna. Sí lo han hecho particulares e instituciones. Una importante de Madrid (no quieren desvelar su identidad) ha comprado tres pinturas y otra institución de Estados Unidos ha mostrado su interés por una obra de Federico de Madrazo , que es la estrella de la exposición: el precioso retrato de Vicenta Bertrán de Lis Espinosa de los Monteros, siendo niña. «Cómo puede pasar inadvertida una obra así, tan interesante y bien pintada... Y con un precio tan atractivo», comentan desde la galería. Sale a la venta por 80.000 euros, el precio más alto. Está muy bien conservada y es una obra inédita. Algunas de las piezas que no se hayan vendido las llevará Caylus a su estand en Tefaf, la prestigiosa Feria de Maastricht , que se celebrará presencialmente del 24 al 30 de junio.

Del medio centenar de óleos expuestos, seis son depósitos de particulares que los han consignado a Caylus para su venta; el resto los ha ido adquiriendo la galería, en torno a la mitad fuera de España. Hay mucha oferta en subastas en Francia. ¿A qué se debe tan poco interés? La causa principal es la falta de difusión , pero a buen seguro también influye el carácter costumbrista de algunas obras de la época, que no son del gusto actual. En general, es una pintura muy refinada .

Se incluyen en la muestra buenos ejemplos de la excepcional retratística del XIX español, con lienzos de Vicente López o los Madrazo. El paisaje está presente con cuadros de Genaro Pérez Villaamil –considerado el gran maestro del paisaje romántico español–, Bartolomé Montalvo, Vicente Poleró... Hay escenas de género, costumbristas (Lucas Velázquez, Manuel Castellano); pintura religiosa de Joaquín Espalter y Antonio María Esquivel... Además, hay un gusto burgués que fomenta la pintura erótica , que sale de los salones privados y se visibiliza públicamente. Se exhibe un retrato de gran tamaño pintado por Esquivel de una dama en una alcoba en actitud muy provocativa. Pero a muchos de los nombres del XIX español les resta valor e interés ser considerados artistas de la estela de Goya . La sombra del maestro de Fuendetodos es demasiado alargada.

Caylus ha estudiado estas obras (en algunos casos se han corregido atribuciones), las ha restaurado y las ha dado a conocer en un catálogo, en edición española e inglesa y con un texto introductorio de José Luis Díez, académico de la Historia y experto en el arte del XIX. En torno a un 30% son inéditas . El retrato del General Prim, obra de Antonio María Esquivel, solo se conocía por una foto en blanco y negro de una antigua monografía. Es la primera vez que se puede ver en 70 u 80 años. En muchos casos las pinturas conservan sus marcos originales, algunos de taller real.