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ABC Cultural

Fernando Castro Flórez

Paradojas del poder político-cultural

Fernando Castro Flórez

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Es paradójico que el poder político-cultural amenace con «cortar el grifo» a los museos que «reformulen» sus exposiciones por razones políticas o de activismo. En cierto sentido se trataría de una anticipación censora, cuasi-platónica, que pretendiendo evitar lo «políticamente correcto» impone «modelos anacrónicos» ... que mantienen al Museo anclado en una suerte de nimbo «pre-político». No hay museo que pueda evitar el activismo político, entre otras cosas porque ese es su origen y razón de ser. Si únicamente es un espacio para los (presuntos) «valores universales» tendríamos que aceptar, definitivamente que el museo es, en todos los sentidos, un mausoleo. La cuestión fundamental parece que fuera si hay que quitar obras «controversiales» del museo, dejar de leer ciertos libros o desmantelar el canon. Considero que lo decisivo sería ofrecer perspectivas contextuales, realizar sólidos análisis históricos y evitar el maniqueísmo. Tal vez bastaría con partir del materialismo histórico o, por lo menos, cuestionar las «verdades recibidas». Si queremos, como creo que es justo, acabar con el racismo y la discriminación en todos sus niveles, lo que tendríamos que evitar es una actitud censora. El museo es, como advirtiera James Clifford, una «zona de conflicto» donde distintas narrativas y perspectivas entran en conflicto. Tenemos que activar y politizar esas situaciones, sin miedo ni bajo la sombra de amenazas «político-culturales», comprendiendo que lo más importante es desplegar el uso público de la razón o, en otros, términos colaborar a la democratización de la cultura.

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