¿Sabes cómo funciona tu cuerpo?

Más de 200 organismos de seres de origen asiático conforman este proyecto que acoge la ciudad malagueña de Marbella desde el 15 de junio hasta el 15 de septiembre, en la última etapa de su tour mundial. «Marbella no es solo Turismo, Marbella es Ciencia e inversión en Educación», señala la concejala de Cultura de la ciudad, Carmen Díaz.

Lo cierto es que la iniciativa pretende convertirse en un referente para los expertos en Medicina que quieran enseñar a sus alumnos la anatomía en vivo de los seres humanos. «Esta exposición es como un libro en tres dimensiones. Aquí se ve todo mucho más claro que en las piezas que nos entregan para analizar en las universidades», cuenta el Dr. Miguel Soria, traumatólogo del Xanit Internacional Hospital de Benalmádena .

La buena conservación de los cuerpos de «The Human Body Exhibition» se debe a un costoso proceso de plastinación , en el que primero se disecan las estructuras anatómicas y los aparatos para después meterlos en acetona . Tras el proceso de extracción de los líquidos corporales, se procede a dar a las piezas un baño en polímero de silicona que sella al vacío los cuerpos y los endurece. De este modo, quedan listos para su estudio con las estructuras intactas.

Esta técnica –en auge desde mediados de los 90- fue autorizada por el doctor Hong-jin Sui , de la Universidad Médica de Dalian (China) y es el laboratorio Dalian Hoffen Biotechnique el que se dedica a seguir investigando en ella con el objetivo de ofrecer muestras divulgativas para las escuelas de Medicina y para el público en general.

Los cuerpos de la exposición – no reclamados y donados legalmente a la Ciencia - corresponden a personas que tuvieron una muerte natural y que estaban libres de enfermedades. Asimismo, podemos encontrar cerebros con infartos, roturas de caderas, aparatos digestivos diseccionados y hasta ligamentos de rodillas en perfecto estado, que al terminar la muestra pasarán por un último proceso de cremación .

En «The Human Body Exhibition» puede comprobarse «in-situ» la destrucción que el propio ser humano hace de su cuerpo. Los pulmones de un fumador contrastan con los de una persona sana, así como el hígado de uno que abusa de la bebida con el de otro que lo tiene en perfecto estado.

Con ofertas de ayuda para dejar el tabaco incluidas, la iniciativa pretende concienciar a la población de que el cuerpo es un mecanismo tan importante como otro cualquiera, hecho por el cual, «debemos protegerle y cuidarle», huyendo de los abusos.

Se trata, en definitiva, de una magnífica introspección en los secretos del organismo humano jamás revelados ante los ojos del propio hombre, que en tan solo un paseo por las salas de la exposición toma conciencia de qué frágil pasta está hecho uno mismo.