Así es el Códice del Toisón de Oro que Patrimonio quiere para el Museo de Colecciones Reales

Una operación que se inició hace más de un año con el objetivo de cerrarse este 2019, cuando se cumplen cinco siglos del primer capítulo del Toisón de Oro , que se celebró en 1519 en Barcelona bajo la presidencia de Carlos I.

La adquisición cuenta ya con el informe previo favorable del departamento de Manuscritos e Incunables de la Biblioteca Nacional de España, que ha valorado la «extraordinaria calidad» del documento. Y con la conformidad de la Junta de Calificación, Valoración y Exportación de Bienes del Patrimonio Histórico Español, que ha considerado la compra «de alto interés» .

Solo faltan algunos trámites administrativos y el pago de los 500.000 euros acordados con el instituto, que fue quien ofreció el códice a Patrimonio Nacional.

Un volumen que alcanzaría un precio muy superior en una venta pública y que es un Códice Iluminado (ilustrado) que contiene los retratos de todos los caballeros que formaron parte de la Orden del Toisón de Oro desde su creación en 1429 hasta la época de Carlos V.

La Insigne Orden del Toisón de Oro fue creada en 1429 por Felipe el Bueno , Duque de Borgoña. Su constitución se realizó para conmemorar el matrimonio del duque con la princesa portuguesa Isabel de Avis , hija del rey de Portugal. Los miembros designados para integrar la Orden eran elegidos entre aquellos monarcas y nobles europeos que se hubieran distinguido en la lucha contra el poder otomano y la liberación de los Santos Lugares. No obstante, el Duque de Borgoña, que era Soberano Gran Maestre , se encargaba de seleccionar a los caballeros.

A través del matrimonio de la Casa de Borgoña con los Habsburgo, la soberanía de la orden pasó al Emperador Maximiliano de Austria y posteriormente a su nieto Carlos I de España. Desde entonces, los Reyes de España son los Soberanos y Grandes Maestres de la Orden. El Rey Don Felipe concedía el primer Collar del Toisón de su reinado a la Infanta Leonor cuando ésta cumplió 10 años.

El libro pasará a manos de Patrimonio Nacional una vez que el pago se haya hecho efectivo y se guardará hasta que se disponga en el futuro Museo de Colecciones Reales.

La pieza que guarda el Instituto de Valencia de Don Juan refleja todo el esplendor a que llegó esta noble institución en tiempos de Carlos V. Data de 1537, cuando reinaba un ambiente de renovación de los Estatutos y aprovechando las informaciones suministradas por los 50 caballeros que la formaban.

«Contrataron entonces los oficiales canciller, tesorero, grefier y rey de armas, a uno de los mejores miniaturistas de su época de nombre Simon Bening , descendiente de una familia de iluminadores, hijo de Alejandro Bening (f 1518)», cuenta el historiador Gregorio de Andrés en «El espléndido códice de la Orden del Toisón de Oro del Instituto de Valencia de Don Juan».

El códice consta de 126 folios en vitela , con un tamaño de 320 x 215 mm. y consta de dos partes. En la primera «se contienen, previo un índice de materias , las constituciones y las ordenaciones para los cuatro oficiales, ceremonias que se han de observar en las solemnidades y fiestas de Ia Orden y manera de proceder para celebrar capítulo», relata De Andrés.

En la última parte, se van describiendo los sucesivos capítulos hasta 1546, y se detallan tanto los caballeros fallecidos y los nuevos afiliados con las modificaciones adoptadas en la Orden.

«Aquí es donde van sucesivamente los soberbios retratos de cada soberano , que suelen ser copias de retratos contemporáneos de estos maestres, colocando Bening de fondo paisajes guerreros o campestres con ciudades que son características de su estilo. En La página frontal a estos retratos van las armas y timbres de éstos, en donde el dibujo y el colorido se aunan de un modo impresionante, con un realismo verdaderamente prodigioso que denotan Ia mano de un iluminador de primera fila. DeI mismo estilo son los 184 blasones que se Ie encargaron al insigne miniaturista», detalla «El espléndido códice de Ia Orden del Toisón de Oro.

Es conocido como «el códice de la emperatriz» porque fue la emperatriz Eugenia de Montijo quien lo trajo de vuelta España desde Francia, adonde había llegado tras la invasión de las tropas napoleónicas en 1808 .

Solo existe otro Códice del Toisón de Oro, que se conserva en Viena