El grafiti de Banksy contra el espionaje, atacado por unos vándalos

«Spy both» («Cabina espía»), el mural de Banksy contra el espionaje, ha sido atacado por unos vándalos. El grafiti fue creado por el artista callejero en la localidad británica de Cheltenham, cerca del centro de escuchas británico, y muestra a unos hombres vestidos con gabardinas y gafas oscuras junto a una cabina de teléfono con unos artilugios para captar conversaciones telefónicas.

El periódico local The Gloucestershire Echo detalla que se ha dibujado un nombre y se han rallado las gafas de sol del espía que aparece a la derecha de la cabina y que, posiblemente, afecte al valor de la pieza.

Continúa así la controversia en torno a «Spy both», que actualmente está siendo objeto de una guerra entre un grupo de vecinos de la zona que quieren conservarlo en Cheltenham y un coleccionista privado estadounidense.

Desde el pasado mes de junio, el grafiti ha sido cubierto por un andamio propiedad del coleccionista de arte Sky Grimes, que afirmaba que había comprado el mural a los propietarios del edificio. La pieza iba a ser trasladada, pero una ordenanza del Ayuntamiento de la localidad paró los citados trabajos.

Ayer mismo, la cadena británica BBC anunciaba que el acuerdo para que «Spy both» se quede en Cheltenham está ya muy avanzado.