20 años del Museo Picasso Málaga: del motín de la plantilla al relevo en la dirección
Bernard Ruiz-Picasso, nieto del artista, cobra mayor protagonismo en el museo a través de FABA, la fundación que creó con su esposa, Almine Rech
José Lebrero: «El Museo Picasso Málaga no es un mausoleo»
Picasso, en 3D
Protestas del personal del museo por un convenio justo
El Año Picasso está siendo un 'annus horribilis' para la familia del pintor. A las puertas del aniversario, en diciembre de 2022, moría Maya, hija de Pablo Picasso y Marie-Thérèse Walter. El pasado mes de junio falleció, a los 101 ... años, Françoise Gilot, la mujer que vivió dos décadas con el artista y con quien tuvo dos hijos: Claude y Paloma. Claude murió en agosto. Paloma se ha quedado al frente de la Administración Picasso.
El 27 de octubre de 2003 nacía el Museo Picasso Málaga, con sede en el Palacio de Buenavista, gracias a unos fondos donados por Christine Ruiz-Picasso, viuda de Paul, primogénito del artista, y su hijo Bernard. Un proyecto que lideró Carmen Giménez. En 2009, se fusionaban las dos fundaciones gestoras del museo en una sola: la Fundación Museo Picasso Málaga. Legado Paul, Christine y Bernard Ruiz-Picasso. Estos últimos son patronos vitalicios. Veinte años después, se ha consolidado como uno de los grandes museos del país. Atesora 233 obras de Picasso, a las que se suman préstamos familiares. Pero la celebración de la efeméride, que coincide con el Año Picasso (se conmemora el 50 aniversario de su muerte), se prevé cuanto menos convulsa.
Por un lado, la negociación del quinto convenio colectivo de la plantilla del museo lleva enquistada desde hace casi un año. Ha habido dos propuestas de la empresa y dos negativas de los trabajadores. La primera, el 26 de abril. El 94% de la plantilla la rechazó. La segunda, el 19 de julio: votaron 78 personas, un 87% de la plantilla. El 68% no la aceptó.
Pepa Babot, presidenta del comité de empresa, explica que se hizo un estudio comparativo con diez museos de una categoría similar para contrastar sus convenios: el Thyssen de Madrid, el Carmen Thyssen de Málaga, el Bellas Artes de Bilbao, el Picasso de Barcelona... «Estamos a la cola en sueldos y derechos laborales». Sobre la reclamación de una subida salarial, la propuesta de la empresa es: un 8% en 2023, un 3% en 2024, un 2,5% más 0,5% de incremento máximo según el IPC en 2025 y un 2% más un 1% de incremento máximo según el IPC en 2026. «Nosotros pedíamos un 25% de aumento anual y bajamos a un 17%. Hemos reducido muchísimo las pretensiones. La empresa nos ha ofrecido un convenio redactado sin negociar con nosotros». Denuncia el comité de empresa que el complemento de 35.000 euros para vivienda que cobrará el próximo director del museo «supera el salario base de 77 de los 89 empleados. Y le pagarán 5.000 euros para viajes particulares. Al nuevo director le ponen la alfombra roja».
Pero los principales escollos están relacionados con la conciliación: número de horas trabajadas, festivos, flexibilidad horaria, teletrabajo, un plan de pensiones... La jornada anual actualmente es de 1.743 horas. «Pedíamos inicialmente 1.582. La empresa ofrecía 1.680 más una bolsa de 30 horas para asuntos propios. Aceptábamos 1.670 más la bolsa de 30 horas y permisos médicos como en el actual convenio. La empresa nos retiraba el permiso para acudir al médico en horario laboral. Pero los tratamientos largos deben excluirse de esa bolsa de 30 horas».
«Queremos un convenio justo, como el resto de museos, y condiciones laborales de conciliación», dice la presidenta del comité de empresa
«Vemos que los otros museos están mejor –añade Babot–. Tienen menos horas de trabajo, más de asuntos propios y vacaciones, trienios, quinquenios... Se les reconoce la antigüedad y la profesionalidad. Ahora entra alguien y cobra lo mismo que la persona que está ocupando ese puesto después de 20 años. Aquí no se premia ni la fidelidad a la empresa ni la antigüedad. Nos acusan de que queremos ser funcionarios. Como si los funcionarios no trabajasen. Que ya me parece peyorativo. No queremos ser funcionarios, queremos tener un convenio justo, como el resto de museos, y condiciones laborales de conciliación».
Ha habido ya movilizaciones con el lema 'Museo de lujo, trabajo de saldo. Por un convenio justo', tres mediaciones del Sercla (sistema extrajudicial de resolución de conflictos laborales en Andalucía)... La cuarta está previsto que tenga lugar el 14 de septiembre. Hay convocada una huelga del 18 al 22 de este mes, que podría ampliarse del 25 al 29 y concentraciones diarias en la puerta del museo de 10 a 13 horas. Podría peligrar la próxima exposición del museo, 'El eco de Picasso' (del 3 de octubre al 31 de marzo), que reunirá obras de medio centenar de artistas: De Kooning, Bacon, Bourgeois, Basquiat, Koons... Podría obstaculizarse el montaje. «No nos gustaría llegar a eso. Queremos que se negocie en serio. No haciendo imposiciones, ni amenazas», advierte Babot. «No vamos a votar nada en la asamblea que no haya sido negociado. O negocian con nosotros o no vamos a llevar a la asamblea ninguna propuesta más de la empresa. Nos quedamos como estamos».
El gerente del museo, Guillermo Peiró, declinó hablar con ABC. No es de recibo que un museo que recibe al año 4,3 millones de euros públicos a través de la Junta de Andalucía no tenga nada que explicar. Sería bueno que hubiera transparencia. La opinión de la empresa tan solo la conocemos por medio de un comunicado, colgado en la sala de prensa en la web del museo, con fecha de 29 de abril, para «precisar las afirmaciones inexactas trasladadas por parte del comité de empresa a la prensa». Entre otras cosas, decía entonces que se había ofrecido una subida del 10% de la masa salarial, que «la pérdida de poder adquisitivo respecto al IPC no ha sido del 25%, sino del 11,5%» y que «se establecen comparativas sesgadas con otras instituciones museísticas, con modelos de funcionamiento y cómputos horarios distintos, o servicios externalizados, que no son equiparables».
Antes del 27 de octubre debe designarse al nuevo director del museo, que sustituirá a José Lebrero
A los problemas laborales se suma el relevo en la dirección artística del museo en pleno aniversario. A sus 69 años, José Lebrero Stals deja el puesto a finales de año. Llegó en 2009, sustituyendo a Bernardo Laniado-Romero. Desde hace unos meses se halla en marcha el concurso internacional para buscar a su sustituto. Convocado en marzo, el plazo de candidaturas se cerró el 27 de julio. Una comisión de gestión, integrada por Salomón Castiel, Álvaro Díaz, Paloma Alarcó y José María Rodríguez-Ponga, se ocupó de supervisar la preselección de las candidaturas para verificar que no hubiera errores de forma.
A partir de entonces, un comité de selección, formado por Laurent Le Bon, presidente del Centro Pompidou de París; Samuel Keller, director de la Fundación Beyeler de Basilea; Karole Vail, directora de la Peggy Guggenheim Collection en Venecia; Lola Jiménez-Blanco, exdirectora general de Bellas Artes, y Eugenio Carmona, catedrático de Historia del Arte y comisario de una de las exposiciones estrella del Año Picasso en el Reina Sofía en noviembre: 'Picasso 1906. La gran transformación', designará una terna de candidatos antes del 17 de octubre. El Patronato deberá elegir antes del 27 de octubre al nuevo director, que ejercerá a partir del 1 de enero de 2024. Se rumorea que se han presentado una docena de candidaturas, más que para dirigir el Reina Sofía (solo 9).
Según las bases del concurso, «debe tener la nacionalidad de algún estado miembro de la Unión Europea o de algún estado cuyos ciudadanos tengan derecho, por tratado internacional, a la libre circulación en la Unión Europea; dominio escrito y hablado del español y el inglés, experiencia profesional acreditable de al menos diez años coordinando o dirigiendo equipos humanos en áreas de trabajo relacionadas con las bellas artes o la historia del arte... Se valora el conocimiento de la obra de Picasso».
Bernard Ruiz-Picasso, con su esposa, Almine Rech
En 2010 se firmó un comodato con la Fundación Almine y Bernard Ruiz-Picasso para el arte (FABA), constituida en 2002 –tiene oficina operativa en Bruselas y la sede social en Madrid–, para la cesión temporal por 15 años de 43 obras de Picasso. Acuerdo que se modificó, firmando sendos acuerdos por tres años (2017-2020 y 2020-2023), en los que se aumentaba considerablemente el préstamo de obras de Picasso: 166 y 162, respectivamente, que se suman a las 233 obras propiedad del museo. De esas casi 400, se exhiben en torno a 120. Con los fondos de FABA se renueva la exposición permanente del museo para ofrecer al público nuevas visiones de la obra de Picasso. Dos grandes especialistas picassianos, Pepe Karmel, profesor de la Universidad de Nueva York, y Michael C. FitzGerald, director del programa de Historia del Arte de Trinity College de Hartford (Connecticut), han sido comisarios asociados, invitados por FABA, para poner en marcha sucesivos discursos expositivos de la colección del Museo Picasso Málaga.
Pero hay voces críticas en torno al cada vez mayor peso de FABA en el museo. No solo cede obras de Picasso. También, piezas de arte contemporáneo de la colección de esta fundación. Así, en 'El eco de Picasso' habrá obras de artistas contemporáneos tanto de FABA como de la galería Almine Rech, hija del diseñador Georges Rech y esposa de Bernard Ruiz-Picasso. Cuenta la galería con sedes en París, Londres, Bruselas, Nueva York y Shanghái. El museo y FABA han colaborado en grandes exposiciones como 'Pince-Picasso', 'Olga', 'Calder/Picasso' o 'Face to face'.
Salvando las distancias, recuerda la relación de FABA con el Museo Picasso Málaga a lo ocurrido con Carmen Cervera en el Museo Thyssen. La baronesa tuvo prestadas durante años numerosas obras de su colección. Aunque el préstamo era gratuito, se beneficiaba de no tener que pagar almacenes y seguros, mientras las obras se revalorizaban en el museo.
Polémico cambio en los estatutos
El pasado 2 de junio, el Patronato del Museo Picasso Málaga aprobó una modificación en el texto refundido de los estatutos de la Fundación Museo Picasso Málaga. Legado Paul, Christine y Bernard Ruiz-Picasso. Concretamente, el punto 37.7, en el que se introduce la figura del delegado del Consejo Ejecutivo, que preside Bernard Ruiz-Picasso. Dice el artículo que «previo acuerdo unánime del Consejo Ejecutivo, su presidente podrá proponer al presidente del Patronato la designación de un delegado o delegada del Consejo, que no sea patrono, que sea miembro externo del Consejo Ejecutivo, con voz pero sin voto y que esté unido a la fundación en virtud de contrato retribuido. Tendrá facultades de control sobre los apoderados y directivos de la fundación, será responsable del planeamiento, organización, coordinación y control de las actividades del museo y responderá de su correcto funcionamiento ante el Consejo Ejecutivo y ante el Patronato, siempre siguiendo las orientaciones del Consejo y bajo su control, y sin perjuicio de las responsabilidades que correspondan a los apoderados y directivos del museo en sus respectivos ámbitos».
Fuentes consultadas por ABC dicen que el motivo de crear esta figura, que no existe en ningún museo que sepamos, es servir de enlace entre el Consejo Ejecutivo y el museo para que haya una mayor conexión. Sin embargo, sus funciones son propias del gerente del museo, con lo que podrían solaparse las funciones de ambos. No sabe aún muy bien cómo se materializará ese cargo. De momento, aún no hay una persona designada para ocuparlo. Pero hay quien cree que con ello Bernard Ruiz-Picasso tendrá más poder aún en el Patronato.