Teddy Bautista y Caco Senante intentan obstaculizar la refundación de la SGAE

Miércoles 30 de noviembre. 16 horas. En las puertas del complejo de la ONCE donde tuvo lugar la Asamblea alguien reparte octavillas. La prensa congregada ante la puerta, al ver que el texto no lleva firma, pregunta de quién es la iniciativa. «Yo solo soy un contratado», responde a la defensiva el repartidor.

El texto está encabezado por un llamativo y contundente titular: «LOS SOCIOS HISTÓRICOS DE SGAE GENEROSOS PERO NO TONTOS. CONTRA LA DEVALUACIÓN DE NUESTROS VOTOS» . Para a continuación cuestionar la ampliación del voto y a la comisión responsable de los cambios cuya «generosidad no conoce límites y pretende que la asamblea apruebe el aumento de votos pero solo a una parte de socios, no a nosotros los históricos». Y denuncia que sus derechos están siendo «mermados con esta reforma». A falta de una rúbrica, se identifican como un colectivo de socios profesionales «que venimos generando derechos desde hace años». Y hacen un llamamiento para «no aprobar la devaluación de nuestros votos». El texto acaba con una arenga: «¡¡VOTA JUSTICIA!!» «¡¡VOTA POR UNA SGAE PROFESIONAL!!» «¡¡VOTA NO A LAS REFORMAS!!» .

¿Pero quién estaba detrás de estas octavillas anónimas 1 ¿Quién había contratado al mensajero? Según ha podido saber ABC, el 28 de noviembre por la tarde, dos días antes de la Asamblea General Extraordinaria, se reunieron en el hotel Fénix de Madrid tres personas muy vinculadas a la SGAE: Teddy Bautista, expresidente del Consejo de Dirección; Caco Senante, hombre fiel a éste y líder de la candidatura CPAC, que en las últimas elecciones de la entidad defendió la gestión megalómana de Bautista, y Juanjo Castillo, activo colaborador, según el sumario instruido por el juez Ruz, en el fraude de los comicios celebrados el pasado 30 de junio en la SGAE. Castillo, contrado por Senante para coordinar la campaña de CPAC, tiene acceso al censo de todos socios (pues lo guardaba de anteriores elecciones), mientras que la otras candidaturas no. También se encargaba presuntamente de contratar a los motoristas que iban a recoger a domicilio los votos afines al CPAC. Uno de esos motoristas ejercería el día 30 como repartidor de octavillas.

Este intento de boicotear la jornada de votación, tuvo, sin embargo, pobres resultados pues tan solo once socios (que sumaban un total de 177 votos) se mostraron contrarios a la reforma de los estatutos. Caco Senante ya demostró sus discrepancias minutos antes de entrar en la Asamblea, al considerar que ésta disminuiría «la representación de los músicos en la Junta Directiva». El gaitero Hevia también rechazó el nuevo texto por no estar de acuerdo «con el reparto del voto». El twitter de la SGAE lo comunicaba a los cuatro vientos (posteriormente fue borrado).

Este intento por evitar el cambio no dio resultado, pero las maniobras de los tres canarios —Del Castillo creció en el mismo barrio que Bautista— demuestran que la vieja guardia del presidente del Consejo de Dirección sigue activa. Lo que plantea una pregunta: ¿Resucitará la figura de Teddy Bautista através de un candidato «tapado» en las próximas elecciones? Habrá que esperar para saberlo. De momento ya hay dos candidatos dispuestos a liderar la refundación de la SGAE: José Miguel Fernández-Sastrón, que vuelve a presentarse; y Antón Reixa, portavoz de la Comisión de reforma que ha decidido optar también a la presidencia. Seguro que no serán los únicos...