Los Goya prometen dardos anti-Sinde

Es el 25 aniversario de los premios anuales de la Academia de Cine y el secretismo es mayor que en las ediciones anteriores. La prensa pudo acceder a los ensayos realizados ayer. Los monólogos y los vídeos seguirán siendo una sorpresa hasta hoy. Aunque los organizadores sí anticiparon que habrá «dardos» contra la titular de Cultura, Ángeles González-Sinde. Y eso ha elevado el morbo de los periodistas y el público. Pese al desacuerdo por la ley antidescargas y la dimisión de Álex de la Iglesia como presidente de la Academia, la ministra y el director compartirán hoy tres horas de gala codo con codo en la fila nueve del Real.

«Teníamos ya un guión, que estaba muy bien armado, con muchos números, y las noticias de hace tres semanas no han cambiado mucho eso», dice Beatriz de la Gándara, responsable de la producción del espectáculo de los Goya este año. «Alex estará recibiendo a todo los invitados, a todos —aclara—. A la ministra de Cultura también, es su invitada, hablan por teléfono, no pasa nada entre ellos», agrega para despejar sospechas.

La Plaza de Oriente tendrá un papel protagonista, con una carpa de 600 metros escoltada por una estatuilla de siete metros de altura y una larga alfombra roja que se extiende desde el Palacio Real hasta el foyer del Real. Según cuentan desde dentro, a De la Iglesia solo le preocupaba el exterior: la monumental cabeza del Goya, la carpa donde se hará el photocall y las entrevistas, el helicóptero que transmitirá imágenes panorámicas de las estrellas deslizándose por la alfombra kilométrica... Desde el verano están planificando todo lo que ocurrirá en el exterior, aunque las lluvias pronosticadas para hoy no estaban en los planes.

La junta directiva de la Academia quería el Real como escenario para los 25 años de los premios. Pero no contaban con la «reducida» capacidad de aforo de la ópera. Se tuvo que hacer un concurso ante notario para sortear las entradas para los miembros de la Academia de Cine porque todos no podían entrar. Los que no se quedarán fuera son los ministros. «Hay mucho interés por parte de muchos de ellos», dicen los organizadores, aunque no quieren adelantar nombres. «Hasta el último momento no tenemos la lista definitiva, por ahora han confirmado cuatro». Entre ellos, la ministra de Sanidad, Leire Pajín, que se presentará con un diseño de Hannibal Laguna. Y, aunque se esperaba contar con algún representante de la Casa Real, han confirmado que el Palco Real estará vacío. «No habrá apariciones sorpresa», dicen. Pedro Almodóvar está de viaje por China, Robert de Niro y Sigourney Weaver —que están filmando en Barcelona— tampoco han confirmado su asistencia, lo mismo que Roman Polanski. De la Iglesia también quería contar con Mario Vargas Llosa e Íker Casillas, entre otras personalidades que fueron noticia en el último año, pero la «incompatibilidad de agendas» truncó ese sueño.

Molestos «no invitados »

Quienes sí han confirmado su asistencia —aunque no hayan sido invitados— son los miembros de «Anonymous», el grupo de protesta contra la Ley Sinde. Han convocado por Facebook y otras redes sociales «al mayor número de personas para que aparezcan en la primera línea de la alfombra roja. La consigna: aparecer con la máscara del héroe de cómics V de Vendetta, la imagen de este grupo anti-Sinde. Según han informado en la web, comenzarán la protesta en cuanto empiecen a aparecer políticos, actores y famosos. Incluso han subido a internet el molde de la máscara en tamaño real para que cualquiera pueda imprimirla. «La gala de los Goya siempre genera expectación ante los medios, y eso incita a mucha gente a reivindicar sus derechos, dice De la Gándara. Y es que hasta una manifestación de protesta puede ser parte del show.