El Teatro Zíngaro presenta su ritual de caballos

PIEZAS MUSICALES

Para adentrarnos en la «filosofía» de este grupo que lleva diecisiete años en danza, lo mejor es conocer a su inspirador, Bartabas. El creador y escenógrafo de «Triptyk» explica que la obra está dividida en tres partes que corresponden a las tres piezas musicales que se escuchan: «La consagración de la primavera» y «La Sinfonía de los salmos», de Igor Stravinsky, y «El diálogo de la sombra doble», de Pierre Boluez, interpretada al clarinete.  «Para mí el caballo es un instrumento, es una manera de explicar los sentimientos», subrayaba Bartabas. El escenario estará ocupado por catorce jinetes, tres bailarines, ocho artistas indios, «los kalaripayatat», que muestran al público su arte marcial milenario y veintiún caballos. «Cada espectador vivirá una experiencia única fruto de las imágenes y los sonidos que perciba», según palabras del director del grupo que se proclama un artista autodidacta. Bartabas ha elegido Barcelona para su primera actuación en España y recuperará sus recuerdos de cuando saltó de forma espontánea a rejonear a la arena de Las Ventas de Madrid. «La corrida es un espectáculo que me fascina», confesó. Y Borja Sitjà destacó que Bartabas, nada más pisar Barcelona, le pidió encarecidamente una entrada para ver a José Tomás el próximo 22 de julio en la Monumental.

UN CABALLO HISTÓRICO

En este montaje, Bartabas no actúa como lo hacía, a lomos de su caballo, en sus anteriores propuestas. «Zíngaro, que da nombre a la compañía, era mi caballo —subraya—. Lo compré cuando apenas tenía doce meses y me ha acompañado durante muchos años hasta que el año pasado se murió dejando un enorme vacío...». Parte de la filosofía del grupo es su convivencia con los animales las veinticuatro horas del día. Al principio eran siete componentes y en la actualidad son cuarenta y cinco miembros. «En diecisiete años hemos hecho siete obras; un montaje cada dos años y medio. Me interesa mucho que el público siga nuestra evolución, por eso tengo la idea firme de que esta visita a Barcelona sea el principio de una estrecha amistad».