Muy probablemente, la peor comedia de la historia
Una joven vive en la famosa mansión de Hugh Hefner, donde fue adoptada directamente desde el orfanato, hasta que es expulsada como si aquello fuera «Gran Hermano», por lo que se ve obligada a buscarse la vida ahí fuera. La protagonista, que no conoce otros ... modales (ni otro vestuario) que el de conejita Playboy, intentará resucitar una hermandad de esas que les gustan a los americanos, con nombre de letra y estatutos de guardería. Lo mejor que se puede decir sobre la película es que no engaña a nadie. Lo peor, que ofrece aún menos de lo que cabía imaginar, sobre todo si se tiene en cuenta la imaginación calenturienta de más de uno, que no se verá correspondida por las imágenes.
Y con ese título, ¿qué esperaban? La chica es insufrible, la trama es de vergüenza propia y al sentido del humor le faltan dos neuronas para llegar a zafio. A su lado, «Dos tontos muy tontos» y «Los bingueros» son obras maestras. La frase más ingeniosa es: «Los ojos son los pezones de la cara». Y con todo, lo peor de esta cinta de usar y tirar de la cadena no son las formas. Si se piensa en el fondo, la conclusión es mucho peor.
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