La 'Piedad' de Miguel Ángel el día que estalla la guerra: 'No se piensa cuánta sangre cuesta'
Florencia expone juntas por primera vez en la historia las tres versiones del maestro del Renacimiento: la del Vaticano, la de Bandini y la de Rondanini
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Iniciar sesiónPor primera vez las tres 'Piedad' de Miguel Ángel se exponen juntas, desde este jueves hasta el 1 de agosto de 2022, en el Museo dell'Opera del Duomo de Florencia. Se podrán así admirar tres de las grandes obras del ... maestro del Renacimiento, realizadas en diversos momentos de su vida, para comprobar su evolución artística. Cada escultura muestra su intensidad y su expresión de dolor, una extraordinaria capacidad para reflejar el sufrimiento y el sacrificio a través del mármol esculpido. No en balde el título de la exposición, que sin duda hará historia, es 'Las tres Piedad de Miguel Ángel. No se piensa cuánta sangre cuesta' .
Este es un verso de Dante, en el canto XIX del Paraíso, que el artista escribió poco antes de su muerte sobre un dibujo de la Piedad donado a la marquesa Vittoria Colonna de Pescara, musa de Miguel Ángel Buonarroti (1475-1564). Es una frase para hacernos reflexionar sobre cuánta sangre se había derramado por la Redención de todos o, simplemente, referida a la Pasión de Cristo. La muestra es un homenaje y una contribución al evento 'Mediterráneo frontera de paz 2022'. Es un encuentro de paz con la participación de obispos y alcaldes mediterráneos, que culminará este domingo con la visita a Florencia del Papa Francisco.
El original de la ' Piedad' de Bandini , conocida también como 'Deposición de Cristo' o 'Piedad de Florencia', está flanqueada por los moldes o calcos de la 'Piedad' del Vaticano , realizada por Miguel Ángel en su juventud, en 1496, cuyo original está en la Basílica de San Pedro, y la 'Piedad' de Rondanini, la última obra que esculpió, conservada en el museo del Castillo Sforzesco de Milán. Para el director del museo de la catedral de Florencia, monseñor Timothy Verdon, se trata de una oportunidad única para observar «la evolución intelectual y espiritual de un artista tan importante, que estuvo al servicio de los papas durante la mayor parte de su carrera. Con esta exposición nos gustaría ofrecer la oportunidad de reflexionar sobre el sufrimiento humano ».
En efecto, se comprueba esa evolución de Miguel Ángel, en una vida artística de más de cincuenta años, que va desde la ambición del joven que grabó su nombre en el pecho de la Virgen en la versión vaticana hasta la identificación personal del anciano artista que, en la del museo de la catedral de Florencia, se representa a sí mismo a semejanza de Nicodemo, el rico fariseo miembro del Sanedrín, discípulo de Jesús. En esta 'Piedad' Bandini, el cuerpo de Cristo está sostenido no solo por la Virgen María, sino también por Magdalena y por el anciano Nicodemo.
La del Vaticano, la más conocida
De las tres esculturas de la Virgen, la más conocida es la 'Piedad' del Vaticano, realizada en vísperas del Jubileo de 1500. Simboliza el amor maternal . El cardenal Jean Bilhères de Lagraulas le hizo este preciso encargo a Buonarroti: «Una Virgen María vestida con Cristo muerto, desnudo en sus brazos». Con esta obra, (1498-1499) Miguel Ángel causó un gran impacto , por la belleza del Cristo desnudo sostenido amorosamente por la Virgen, jovencísima. La obra fue criticada en su época por la juventud de María, ya que no parecía muy en consonancia con la Virgen.
La escultura fue colocada al principio en la capilla de Santa Petronilla poco antes del 1500, año del jubileo. Luego se trasladó a San Pietro, y en el siglo XVIII se expuso en la nave de la derecha, a la entrada de la basílica, donde se puede admirar hoy. Según la lectura que se hace de esta Piedad, el artista logró representar la divinidad de Jesús en el cuerpo de un hombre de 33 años, sin señales de haber sufrido violencia, viendo en su figura al Cristo resucitado que vence a la muerte. El 21 de mayo de 1972, la escultura recibió quince martillazos por parte de un enfermo mental , rompiendo la nariz y parte de un brazo de la Virgen. Desde entonces, la obra restaurada está protegida detrás de un cristal blindado.
La de Bandini, nunca acabada
La segunda Piedad, la del Duomo de Florencia o Bandini fue esculpida por Miguel Ángel muchos años después que la del Vaticano. Durante este período, Roma había sido saqueada, la república de Florencia se había derrumbado y la poderosa e influyente familia de los Medici había regresado a la ciudad. Tras dejar Florencia en 1534, Buonarrotti se instaló en Roma. Ya anciano, el artista se centró cada vez más en el destino humano, en la muerte y resurrección de Cristo . A menudo con crisis depresivas, temiendo su propia muerte y el juicio divino. Hizo incluso voto de pobreza. Esa idea del juicio final le obsesionó y le llevó a refugiarse en los brazos de María y puso a Cristo en el centro de su inspiración. Así cobró vida la 'Piedad' de Bandini, de un bloque de mármol lleno de impurezas y extremadamente duro que, como escribió Giorgio Vasari, desprendía haces de chispas con cada golpe de cincel. Por todo ello, la realización de la 'Piedad' de Bandini le resultó larga y difícil.
La historia de esta 'Piedad' es digna de una novela. El grupo escultórico, de 226 centímetros de altura, fue esculpido en un enorme bloque de mármol de Carrara, entre 1547 y el 1555. Además de no ser nunca acabada, corrió el riesgo de desaparecer para siempre porque en un momento de angustia el artista intentó destruirla y dañó algunas partes. Todavía hoy se observan las señales del daño en el codo, en el pecho, en el hombro de Jesús y en la mano de María.
Miguel Ángel la vendió , en 1561, por 200 escudos al banquero Francesco Bandini , familia que da su nombre a la Piedad. Antes de ser vendida, la escultura fue completada en algunas partes por Tiberio Calcagni, principal asistente de Buonarroti. Gracias a dos biógrafos coetáneos del artista, Giorgio Vasari y Ascanio Codivi, se sabe que la escultura estaba destinada en principio a un altar en la basílica de Santa María la Mayor de Roma, ante el que Miguel Ángel habría deseado ser sepultado. Después el artista cambió de opinión y dejó escrito en su testamento que debía ser enterrado en Florencia. Tras su fallecimiento en Roma, el 18 de febrero 1564, su sobrino Leonardo se encargó de cumplir su última voluntad y Miguel Ángel recibió definitiva sepultura al mes siguiente en la célebre iglesia florentina de la Santa Croce. La obra permaneció en la villa Bandini en Monte Cavallo y en 1674 fue comprada por Cosimo III de Medici que la destinó al sótano de San Lorenzo. En 1722 la 'Piedad' Bandini fue trasladada al Duomo de Florencia y desde 1981 se encuentra en el Museo dell'Opera de esta catedral de la capital toscana.
Su restauración se completó recientemente . La escultura ha adquirido un pátina cromática diversa al acumularse durante siglos suciedad y los efectos de humo de velas de cera . Se ha respetado la visión ya consolidada de la superficie de la escultura en tono ámbar, un cambio de color probablemente debido a una intervención del siglo XIX para crear un molde.
La de Rondanini, la más conmovedora
La tercera Piedad, la de Rondanini, es la más conmovedora, fue diseñada entre 1552 y 1553. En ella trabajó hasta seis días antes de su muerte . La obra fue encontrada en el estudio de Miguel Ángel después de su fallecimiento. Adquirida por los marqueses de Rondanini en 1744, la escultura llegó al Castillo Sforzesco de Milán en 1952. Cuando veía cerca su propia muerte, Miguel Ángel meditó profundamente sobre la Pasión de Cristo , como sugiere el dibujo contemporáneo de la Piedad, donado a la marquesa de Pescara, Vittoria Colonna, en el que escribió el verso del Paraíso de Dante. El resultado de esta meditación espiritual fue la ejecución de una obra sublime de gran belleza Para los estudiosos de la obra de Miguel Ángel, esta última escultura debe ser considerada una oración más que una obra de arte. Los cuerpos de la Virgen y su hijo , en una especie de fusión mística , parecen desprenderse del suelo y elevarse hacia el Padre. Representa el resultado final del largo camino de arte y fe de Miguel Ángel.
A partir del próximo otoño, las tres esculturas de la Piedad, en moldes de yeso, serán expuestas en la Sala delle Cariatidi del Palacio Real de Milán.
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