De ama de casa a atractiva espía que se lanzó en paracaídas en el Desembarco de Normandía

Su rocambolesca historia ha vuelto a salir a la luz este viernes debido a que, según han determinado varios periódicos internacionales como el diario « The Guardian », la medalla que le fue otorgada de manera póstuma a esta heroína por saltar tras las líneas enemigas en el Desembarco de Normandía (la « Cruz de San Jorge ») será subastada el próximo 22 de julio por un precio que rondará entre los 250.000 y 300.000 libras en la página « Dix Noonan Webb ».

Violette Reine Elizabeth Bushell vino al mundo en Paris (Francia) en 1921. No obstante, terminó pasando su infancia en Inglaterra debido a que su familia hizo el petate hacia las tierras británicas. Tras acabar sus estudios, en 1940 se casó con Etienne Szabo, un oficial de la Legión Extranjera que, para su desgracia, pasó una buena parte de su vida haciendo viajes entre sus diferentes destinos y Londres . Por su parte, y tras tener un bebé cuando contaba 21 años, nuestra protagonista se dedicó a las labores del hogar.

Todo parecía ir sobre ruedas para esta mujer hasta que su marido falleció en combate. Ese suceso debió marcar su vida, pues no tardó en enrolarse en el SOE (el servicio secreto británico). Allí fue adiestrada en varias artes marciales , en el sabotaje de los medios de transporte nazis y, cómo no, también aprendió a matar mediante armas de fuego .

Su primera misión la llevó a cabo en abril de 1944 (dos meses antes del Desembarco de Normandía), momento en que fue lanzada sobre Francia para llevar a cabo varios sabotajes. Allí fue arrestada hasta dos veces por los nazis , aunque –para asombro de muchos- pudo no desvelar su verdadera identidad al enemigo. Tal era su habilidad, que logró escapar y regresar a casa junto a su pequeña. Había engañado a la muerte.

En su siguiente misión, por el contrario, no tuvo tanta suerte. Esta se inició pocos días días después del Día D, el desembarco de las tropas aliadas en la región de Normandía el 6 de junio. Violette saltó el día 8 en paracaídas sobre Francia con el objetivo de contactar con la resistencia francesa (a la que los británicos habían armado), entrenar a sus miembros para que causaran problemas al ejército nazi, y hacer las veces de intermediaria entre ellos y los altos mandos ingleses .

Una vez en suelo galo, su primer paso fue llegar hasta un guía que le transportara en coche hasta zona segura. Sin embargo, esta primera parte de la misión salió terriblemente mal y los germanos detuvieron el vehículo en una carretera . En ese momento, Violette se armó con su Sten y –según varias fuentes- se enfrentó a los nazis sola. Aunque existen versiones contradictorias, la más extendida es que pudo lanzar hasta la última bala que tenía sobre los seguidores de Hitler antes de ser capturada.

Sin embargo, el número de enemigos terminó volviéndose en su contra y, finalmente, fue atrapada e interrogada por los soldados alemanes. Al parecer, nunca les dijo más que su nombre, como una buena espía. Con todo, eso no impidió que fuese trasladada al campo de concentración de Ravensbrück (célebre por ser en el que se entrenaban las famosas « guardianas nazis »). Allí fue torturada y, finalmente, asesinada de un disparo en la cabeza en 1945, poco antes del final de la Segunda Guerra Mundial.