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ABC Cultural

Viaje al santuario de Altamira

Después de doce años cerrada, cinco afortunados recorren la capilla sixtina del arte rupestre

Viaje al santuario de Altamira celedonio

álvaro san miguel

El silencio y las sombras envuelven Altamira . Cuando Marta, una de las guías, cierra tras de sí la puerta de acceso a la cueva, por la que no pasaba un visitante desde hace más de una década, el ruido del mundo moderno se apaga ... y la historia cobra vida. La sala de los polícromos, la capilla sixtina del arte rupestre , está totalmente a oscuras. Un haz de luz fría ilumina un bisonte y la piel rojiza del animal brilla con la humedad de la cueva. La guía, que conoce la magia que desprende esa bóveda, donde el hombre empezó a contar las primeras historias, guarda silencio. Dan escalofríos al pensar que estoy en la cueva donde empezó la historia del hombre.

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