El Banco de España ratifica el fin de la recesión de la economía española

Entre los factores que explican este cambio de tendencia de la economía del país, según el Banco de España, está la mejora de la confianza de los hogares, el aumento de las ventas de coches gracias a las ayudas del plan PIVE y una caída menos fuerte de las ventas al por menor.

Moody’s también es optimista

La confirmación por parte del supervisor del fin de la recesión coincide con las previsiones realizadas desde el Gobierno, que ha situado el crecimiento de la economía española entre julio y septiembre entre el 0,1 y el 0,2%. En todo caso, habrá que esperar al menos un mes para conocer las cifras oficiales.

Esta mejora de la situación de la economía española también ha sido apreciada desde el exterior en los últimos días. La agencia de calificación Moody’s se sumó ayer al optimismo y anunció también la pronta recuperación de la economía, «que empezará a crecer antes del fin del año, sobre todo gracias a las exportaciones aunque, en cualquier caso, la recuperación será débil». En concreto, Moody’s calcula que España se contraerá este año un 1%, frente al 1,3% previsto inicialmente por el Gobierno, y en 2014 crecerá un 0,3% y un 1,5% en 2015.

La agencia de «rating» añade a renglón seguido que, en todo caso, este crecimiento será «demasiado débil para bajar significativamente la tasa de paro y crear empleo, lo que no ocurrirá hasta el año 2016». Moody’s subrayó también que «los bancos españoles seguirán sometidos a una presión considerable por su exposición al sector inmobiliario, siniestrado después de la explosión de la burbuja inmobiliaria».

En relación con el turismo, uno de puntos fuertes de la economía española, el Banco de España asegura que los indicadores del mes de julio apuntan a una continuación de la evolución favorable de esta rúbrica exportadora, lo que se vino a confirmar en agosto, con un nuevo récord de turistas. Así, tanto las entradas de turistas no residentes como la cifra de sus pernoctaciones en hoteles aumentaron en el séptimo mes del año.

Sobre la balanza de pagos, el supervisor financiero indica que los datos de junio muestran que la economía continuó registrando un saldo positivo, como en los meses precedentes. Así, el conjunto del semestre se saldó con una capacidad de financiación de 5.300 millones de euros.

Por el lado de la oferta, la información relativa a la actividad industrial apunta, en su conjunto, a un mantenimiento del tono «algo más favorable» observado en el segundo trimestre del año, mientras que los datos del sector servicios también apuntan a una «evolución más favorable».

En materia de empleo la institución gobernada por Luis María Linde indica que la información más reciente sobre el mercado laboral mantiene la tónica de un «menor ritmo de caída», igual que en los meses anteriores. En materia de precios y costes, resalta la moderación de los costes laborales en el tercer trimestre, así como la desaceleración del IPC.

El Banco de España cree que una de las consecuencias de la reforma laboral es la reducción de los salarios de los trabajadores, fruto de las modificaciones de la regulación de la negociación colectiva y la aceleración de los procesos de renovación de los convenios, sobre todo desde principios de este año, coincidiendo con la entrada en vigor de la reforma laboral en el mes de febrero de 2012. No obstante, el Banco señala que es difícil establecer una correlación entre ambas cosas «dado el intenso deterioro de la actividad y del empleo».

Las empresas, al alza

Por otra parte, el beneficio neto de las empresas no financieras aumentó un 32,1% en los seis primeros meses del año, frente a la caída del 72,6% contabilizada en el mismo período e 2012, debido principalmente a los resultados extraordinarios, según indica el Banco de España.

En concreto, el supervisor explica que los resultados atípicos afectaron muy positivamente al beneficio, debido fundamentalmente a que durante la primera mitad de 2013 el importe de las provisiones fue muy reducido, en contraste con los «cuantiosos gastos contabilizados en el primer semestre de 2012» por del deterioro de activos de naturaleza financiera.